Universidad británica quiere más dedicación de los becarios brasileños

La Universidad de Southampton, en Inglaterra, se quejó de la falta de dedicación de los estudiantes brasileños del Programa Ciencia sin Fronteras (CSF). El pasado sábado (13), los becarios del programa en la institución recibieron un correo electrónico del Science without Borders UK (SWB UK), socio internacional del CSF en el Reino Unido, advirtiendo del “gran número de quejas respecto a la asistencia y la dedicación a los estudios”.

“Es muy decepcionante para nosotros escuchar que los resultados vienen siendo bajos y que [los estudiantes] no se están esforzando. (...) Esto no se aplica a todos, pero a aquellos [en esta situación], les pedimos esforzarse más y cumplir con todos los compromisos firmados”, subraya el mensaje.

El SWB UK también afirmó haber pedido a la universidad los nombres de los becarios que no se están dedicando lo suficiente. Existe la posibilidad de que tengan que devolver lo que han recibido del programa. La Universidad de Southampton encabeza el ranking de instituciones dedicadas a la investigación. En 2013, recibió a 38 alumnos brasileños del CSF y, a finales de este mes, recibirá a 33 más.

Denise Leal, becaria de ingeniería, comentó: “Ofensivo haberlo recibido [el mensaje] porque me dediqué, pero entiendo su intención. La mayoría de los estudiantes en el programa no se involucra mucho porque el gobierno [de Brasil] no exige nada a cambio. Los que quieren, estudian. Los que no quieren, viajan, porque el gobierno no cobra resultados. El dinero es más que suficiente, por lo que prefieren viajar y perderse las clases, porque los profesores no pasan lista.”

El SWB UK respondió a Agência Brasil que el correo “no debería haber sido enviado a todos los estudiantes, fue un error administrativo”, y señaló que los estudiantes brasileños tienen un “impacto positivo” en los campus y que muchas veces las universidades británicas les alaban. “Muchos ya ganaron premios, mientras que otros se destacaron en los medios de comunicación, tanto en el Reino Unido como en Brasil. Muchos están firmando acuerdos de investigaciones a largo plazo.”

El Ciencia sin Fronteras se puso en marcha en 2011, con el objetivo de ofrecer 100 mil becas en el extranjero en las áreas tecnológicas, de salud y ciencias exactas, matemáticas, química y biología, e ingeniería, hasta el final de 2014. A partir de 2015, una nueva etapa está pensada para ofrecer 100 mil becas más hasta 2018.

Los casos de alumnos que utilizan el dinero de la beca para propósitos no académicos no están restringidos a Inglaterra. El estudiante de medicina Mário Vasconcelos, exbecario en Alemania, dijo que “hacía las pruebas que quería”. “No había ninguna exigencia de Brasil. Al regresar, solo tuve que probar que regresé. Conozco a personas que no asistieron a una sola clase.”

Carolina Marques, que estudió en Australia, afirmó que más del 50% de los becarios no tomaban los estudios en serio. “Tanto es así que tenía vergüenza de decir que participaba en el programa. Evitaba estar en compañía de los brasileños, ya que muchos decían abiertamente que estaban allí para viajar y disfrutar del dinero de la beca.”

Traducción: Leonardo Vieira