Interiorización de venezolanos que vinieron a Brasil comienza en abril

El proceso de interiorización de los inmigrantes venezolanos que están en Roraima, estado de la Región Norte del país, empieza en abril, llevando parte de ellos a las ciudades de São Paulo, en la Región Sudeste de Brasil, y Manaus, en el vecino estado de Amazonas, según informó la Casa Civil del gobierno estadual,

El objetivo es llevarlos a otros estados, donde tengan mejor estructura para establecerse y aliviar el hacinamiento en Roraima, límite con Venezuela y que se ha convertido en una de las principales rutas de entrada al país de los inmigrantes, especialmente por la ciudad de Pacaraima.

En la ciudad de São Paulo, se disponibilizaron 300 locales de acogida para los inmigrantes. A principio, la capital recibirá a 186 personas - 115 hombres y 71 mujeres - en nueve locales del ayuntamiento, cuatro de ellos especializados en inmigrantes, y cinco centros de acogida que atienden a personas que no tienen donde vivir. También habrá 180 locales de acogida en Manaus

La interiorización de los venezolanos en el país es inevitable, independientemente de las acciones del gobierno federal, debido a la sobrecarga enfrentada en Roraima, según la evaluación de la organización no gubernamental (ONG) Conectas, que acompaña la situación de estas personas.

“Son hombres y mujeres solteros [que irán a São Paulo]. Preferimos empezar por los que tienen este perfil para ganar experiencia. Queremos hacer esto de la forma más organizada y humanizada posible para evaluar la posibilidad de hacerlo con familias y niños, pero queremos ser muy responsables en el primer momento para aprender con esta experiencia", dijo el secretario del ayuntamiento de Asistencia Social de São Paulo, Filipe Sabará.

Preguntado sobre la experiencia negativa en la acogida de los haitianos entre los años 2014 y 2015, cuando muchos de ellos no se adaptaron a los lugares en que los alojaron, el secretario dijo que, en la época, esos inmigrantes fueron acogidos en los antiguos albergues que eran para los que vivían en las calles, los cuales no contaban con estructura adecuada para las necesidades. Ahora, según él, incluso algunos de los centros destinados para personas que viven en las calles, son locales nuevos, inaugurados recientemente y que cuentan con mejor estructura.

"[Los actuales centros de acogida] son espacios calificados, con dormitorios, baños, duchas, sala de informática, sala de terapia individual, área de estudios, por tanto son servicios bien calificados y que pueden recibir muy bien a estas personas. Estamos asociados a la Secretaría de Salud, esto ya forma parte del alcance del sistema de acogida, está incluido en el paquete ", dijo.

Otro factor que dificultó la interiorización de los haitianos, que entraban por el estado de Acre, fue la decisión unilateral de mandarlos a otros estados, sin la coordinación con gobernadores y alcaldes para que los recibirían y sin la mediación del gobierno federal.

“ Esa fue una decisión unilateral del gobierno de Acre y fue muy problemática, porque no estaba garantizada la debida información a los haitianos sobre hacia dónde iban. El hecho de que ni el gobierno del estado, ni el ayuntamiento estuvieran conscientes de ello hizo que esas personas fueran simplemente colocadas en la ciudad, y no hubo ninguna preparación para acogerlas", evaluó Camila Assano, de la ONG Conectas y miembro del Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

A pesar de que Colombia atrae a la mayor parte de los que dejan Venezuela, tanto por hacer frontera como por tener la misma lengua, Brasil se ha mostrado un destino residual. Según la Conectas, 600 mil venezolanos entraron a Colombia en este último período de crisis, pero el país ha cerrado la frontera en algunos momentos y comenzó a exigir pasaporte a los inmigrantes.

En Brasil, cerca de 32 mil venezolanos ya pidieron refugio o residencia temporaria desde 2015, cuando comenzó el flujo migratorio al país, informó la Casa Civil. Pero el flujo en la frontera es mayor, ya que muchos de ellos vuelven a Venezuela para buscar a sus familias o para llevar dinero a los que se quedaron. Por día, entran de 600 a 800 venezolanos a Brasil, pero no quiere decir que estén establecidos aquí.

Asociaciones y cursos

La mayoría (72%) de los inmigrantes venezolanos en Roraima están en el grupo de edad entre 20 y 39 años. El 78% tiene un nivel educativo equivalente a la enseñanza secundaria completa y el 32% tiene curso superior o posgrado. Los datos son de acuerdo a la investigación hecha por el Consejo Nacional de Inmigración (CNIg), que mostró que, debido a las características de los inmigrantes, este es un contingente con gran potencial de ser "plenamente insertado en la sociedad y en el mercado de trabajo brasileño".

Aunque las políticas de interiorización tienen amplia aceptación entre los inmigrantes venezolanos en Roraima, donde el 77% de los encuestados dijo que aceptarían trasladarse a otro estado si el gobierno brasileño les da apoyo. La oferta de trabajo (80%) en otro lugar del país es la principal demanda para aceptar el desplazamiento, seguida de ayuda económica (11,2%) y ayuda de vivienda (5,2%). Otro dato importante es que sólo el 25% de ellos pretenden regresar a Venezuela. De los que piensan volver, la mayoría (47%) estima un plazo superior a dos años, pero condicionan el retorno a la mejora de las condiciones económicas (61%).

Para insertar a los inmigrantes venezolanos en el mercado de trabajo de Sao Paulo, el secretario del ayuntamiento de Bienestar Social, dijo que hay un programa de enseñanza de la lengua portuguesa y asociaciones para facilitar el contacto entre candidatos y empresas. "Hemos mantenido contacto con los consulados de los países que hablan la lengua española, para que puedan hacer contacto con empresas, tanto de origen español y de América Latina, que faciliten la entrada de estas personas, para colocarlas en el mercado de trabajo lo más rápido posible".

La secretaria municipal de Derechos Humanos de São Paulo, Andrea Zamur, coordinadora de Políticas para Inmigrantes y Promoción del Trabajo Decente, recordó que la ciudad fue la primera en implementar el Centro de Referencia y Atendimiento al Inmigrante (Crai) en el año 2014, es un espacio donde las demandas de inmigrantes son oídas y orientados a lugares donde sus pedidos podrán ser resueltos.

"Allí, todos los asistentes son inmigrantes, lo que facilita el entendimiento con el idioma, que generalmente es una gran barrera. También tienen familiaridad con la temática migratoria. Este es un espacio muy importante para nosotros. Es un lugar de referencia para acceder a servicios y derechos ", dijo Andrea.

En el contexto federal, el Ministerio de Defensa destinó este mes 57,7 millones de dólares para asistencia de emergencia a los venezolanos. Según el ministerio, el dinero se aplicará en programas de asistencia a los refugiados en Roraima y para mejorar las acciones de control en la frontera.

"Se realizarán las siguientes acciones: construcción y operación de refugios, recuperación y ampliación de espacios ya existentes, instalación de puestos de clasificación e identificación, apoyo logístico de transporte para interiorización de los inmigrantes e intensificación de vigilancia en la línea de frontera".

Los recursos se utilizarán por demanda, a medida que evolucionan las acciones. "El empleo de los recursos tiene como objetivo la adquisición de artículos de higiene personal, alimentación especial para niños y mejora de centros de destinos ya existentes, para proporcionar condiciones más dignas a los inmigrantes", informó el ministerio.

Traducción: Fanny Guadalupe