“La filosofía me salvó la vida”, dice transexual aprobado en la universidad

Raul Capistrano fue uno de los alumnos del curso de preparación creado

Publicado em 13/03/2016 - 09:41 Por Léo Rodrigues – Corresponsal de Agência Brasil - Belo Horizonte

Cursinho Transenem prepara estudantes em Belo Horizonte

Creado en 2015, el curso Transenem obtuvo resultados exitosos ya en su primer año Léo Ro drigues/Agência Brasil

El año pasado, Raul Capistrano fue el primer estudiante en ingresar a su sala para hacer la prueba del Examen Nacional de la Enseñanza Secundaria (ENEM, por sus siglas en portugués) y el último en salir. Al lado de cada cuestión resuelta, escribió el nombre de los profesores del TransEnem BH, de Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais, responsables de su aprendizaje sobre aquel tema. Hoy, como estudiante de Filosofía en la Universidad Federal de Minas Gerais (UFMG), se emociona.

A filosofia salvou minha vida

Raul, quien también tuvo, como uno de los incentivos para hacer el ENEM, la posibilidad de utilizar su nombre masculino.Imagem/Rede Minas

“El curso TransEnem BH me abrió las puertas y me sentí obligado a acertar todas las preguntas. Aprobé el curso que quería, en el turno que quería, y en la universidad que quería”, cuenta Raul, quien también tuvo, como uno de los incentivos para hacer el ENEM, la posibilidad de utilizar su nombre masculino.

Raúl es transexual y una fuente de inspiración para otros 20 estudiantes travestis y transexuales que dieron, a principios de esta semana, el primer paso para realizar el sueño de ingresar a la universidad: la primera clase en TransEnem BH, curso exclusivo para transexuales.

Creado en 2015, el curso obtuvo resultados exitosos ya en su primer año. Aunque tuvieron clases solo los sábados y en lugares sin estructura adecuada, nueve de sus 12 estudiantes tomaron exámenes de selectividad. Además de la aprobación de Raul en la UFMG, se celebraron otras dos victorias: la de un estudiante en la Pontificia Universidad Católica de Minas Gerais (PUC Minas) y de otra también en la UFMG.

Oportunidad

La idea de crear el curso surgió a partir de encuestas respecto a las dificultades de inserción de travestis y transexuales en el mercado laboral. Según datos de la Asociación Nacional de Travestis y Transexuales (Antra), el 90% de esa población en Brasil está en la prostitución u ocupa puestos de trabajo informales. “Son personas que quieren desarrollar otras actividades, pero no consiguen. Les falta formación, ya que no reciben incentivos de la escuela”, dice una de las organizadoras del curso y profesora de derecho laboral en la PUC Minas, Adriana Ribeiro Alves.

Este año, 20 estudiantes tendrán clases de lunes a viernes por la noche. “Nuestra demanda fue mayor que el número de plazas, pero no queríamos crear cualquier criterio que excluyera aún más las personas. Así que la selección fue muy sencilla: por orden de inscripción”, dijo Adriana.

Adriana do Valle, coordenadora do ncurso Transenem

“Nuestra demanda fue mayor que el número de plazas, pero no queríamos crear cualquier criterio que excluyera aún más las personas. Así que la selección fue muy sencilla: por orden de inscripción”, dijo Adriana.Imagem/Rede Minas

La estructura también mejoró. El trabajo sensibilizó la Secretaría de Educación de Minas Gerais, que decidió disponibilizar una sala de la Escuela Pedro II. El equipo de voluntarios, así como profesores y administradores, ganó el apoyo de un psicólogo que también proporciona orientación profesional.

Los organizadores buscan ahora por empresas que patrocinen los útiles escolares y el transporte de los estudiantes. Además, desarrollaron una campaña de financiación colectiva y hasta la fecha obtuvieron lo equivalente a unos US$ 650, que todavía es insuficiente.

Superación

El habla de transexuales y travestis suele tener un punto de convergencia: la falta de estímulo con los estudios en la escuela tradicional. Allí, acorralados por el prejuicio, se sientan en los fondos de la sala y no se expresan. El autoestima se desmorona y muchos viven en depresión. El absentismo escolar es a menudo la salida adoptada. “El ambiente es muy hostil. Desgraciadamente, muchos profesores utilizan ejemplos homófobos, transfóbicos y sexistas para enseñar. Es desalentador. No podemos expresarnos y hacer preguntas sin ser ridiculizados y burlados”, dijo Raul.

Por eso, el curso TransEnem BH busca construir un entorno propicio para la recuperación de esa autoestima. Profesores son instruidos a preparar no solo técnicamente a los alumnos, sino también fomentar la participación y el respeto de la identidad de género. “Les pedí una redacción con el tema de la transfobia en Brasil y antes realizamos un debate muy caliente. Una chica dijo, entonces, que comenzaría a escribir su texto en lágrimas. A menudo les falta espacio para que puedan hablar sobre el problema en sí y ser escuchados. El resultado de la actividad fue muy positivo. Me emocioné bastante”, dice Elisa de Oliveira, profesora de literatura y redacción.

El profesor de historia, Mário Pollastri, añade que, cuando los alumnos superan los traumas de la escuela secundaria o primaria, se vuelven más cómodos. “No vemos en cursos tradicionales el mismo interés que existe en esos estudiantes. Ellos traen una experiencia muy distinta a la que estamos acostumbrados, lo que hace que las clases se conviertan en un campo de aprendizaje para ellos, ellas y para nosotros.”

Libernina Andrade

Libernina Andrade, de 20 años, salió de la ciudad de Almenara, en la frontera de Minas Gerais con Bahía, donde vivía sin perspectivas debido a los prejuicios y la complicada relación con la familiaImagem/Rede Minas

Nombre social

Libernina Andrade, de 20 años, salió de la ciudad de Almenara, en la frontera de Minas Gerais con Bahía, donde vivía sin perspectivas debido a los prejuicios y la complicada relación con la familia. Hoy sueña con convertirse en ingeniera ambiental o ingeniera química y ve el TransEnem BH como un aliado. “Cuando llegué tenía mucho miedo a dar mi opinión, pero los profesores nos animaron a realmente luchar por nuestros derechos.”

El diploma, según Libernina, puede ayudarle a superar la discriminación en el mercado laboral. Su último trabajo fue como empleada de telemarketing, cuando todavía se vestía con ropas consideradas masculinas, pero se perdió varias oportunidades como mujer. “Es complicado. Uno hace las entrevistas y percibe que agradó. Tiene las cualidades necesarias. Entonces, cuando presenta el documento con un nombre masculino, piden disculpas y dicen que el perfil no era exactamente lo que estaban buscando.”

Libernina planea solicitar la emisión de una tarjeta de identidad con su nombre social. “Es solo uno de los derechos que hemos conquistado, pero aún nos falta mucho.”

La adopción del nombre social fue lo que abrió las puertas para que Raul ingresara en el curso de filosofía de la UFMG. “Solo hizo la solicitud porque abrieron la posibilidad de hacer las pruebas utilizando el nombre social. Si no fuera por eso, no las habría hecho, porque la vergüenza es demasiado grande.”


Traducción: Leonardo Vieira


Fonte: “La filosofía me salvó la vida”, dice transexual aprobado en la universidad

Edição: Talita Cavalcante / Olga Bardawil

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