Manifestantes salen a las calles contra el juicio político de Rousseff

Brasilia - Manifestaciones en contra de la destitución de la presidenta Dilma Rousseff tuvieron lugar el jueves (31) en varios estados brasileños y en el Distrito Federal. Organizadas por el Frente Brasil Popular, las protestas reunieron a miles de personas que salieron a las calles gritando consignas como “No habrá golpe, habrá lucha”. También se veían pancartas de apoyo al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y a Dilma Rousseff.

En Brasilia, representantes de diversos sindicatos y movimientos sociales, de estudiantes y de trabajadores de todo el país asistieron a los actos llevando banderas de sus organizaciones. Unos 50 mil manifestantes, según la Policía Militar, siguieron en marcha hacia el Congreso Nacional para mostrar a los parlamentarios su descontento con el juicio político.

La representante de la Central Única de los Trabajadores (CUT), Janeslei Albuquerque, dijo que el acto fue esencial. “Brasilia, siendo la capital del país, es esencial para dar visibilidad a nuestra insatisfacción. Entre 700 y mil autobuses llegaron aquí, procedentes de todos los estados brasileños”, dijo.

En São Paulo, las manifestaciones tuvieron lugar en la céntrica Praça da Sé, donde miles de personas se reunieron rodeadas por coches con altoparlantes y banderas de diversas entidades, como el Frente Brasil Popular, la Central de Movimientos Populares (CMP), la Central de los Trabajadores de Brasil (CTB), la Unión de la Juventud Socialista, así como sindicatos de diversas categorías.

Los manifestantes portaban globos gigantes, pequeños globos rojos y pancartas con mensajes en contra de la destitución. El metalúrgico João Souza Neto, de 47 años, dijo que protestaba en contra del golpe y por la democracia. Según el coordinador de la Central de Movimientos Populares, Raimundo Bomfim, no hay justificación legal para la destitución. “Estamos seguros de que no habrá. Y si ocurre, Temer [el vicepresidente] ya empieza un gobierno sin legitimación”, dijo.

En Río de Janeiro, los manifestantes hicieron un acto a favor del gobierno en el céntrico Largo da Carioca. La estrella de la noche fue el cantante y compositor Chico Buarque, que fue aclamado por el público.

En Porto Alegre, manifestantes que se oponen a la destitución ocuparon la Esquina Democrática con banderas del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), de CUT, movimientos feministas, de negros y de la población LGBT. La presidenta de la Unión de Negros por la Igualdad en Río Grande do Sul, Elisa Vargas, afirmó que las protestas contra el gobierno son de blancos y ricos que no representan al pueblo. “Si ves las manifestaciones de la gente de derecha, no nos encontrarás allí. Somos la mayoría de la población brasileña y elegimos a Dilma”, subrayó.

En Salvador, representantes de sindicatos, movimientos sociales y de la sociedad civil hicieron una marcha por el centro de la ciudad. Un coche con altoparlantes les acompañó durante el camino, donde representantes se pronunciaron a favor de la presidenta. Según la policía, unas 12 mil personas se encontraban en el acto.

En Fortaleza, capital del estado de Ceará, el acto contra el juicio político reunió a unos 10 mil manifestantes en una marcha que recordó las consecuencias del golpe militar de 1964. El doctor Manuel Fonseca, de 70 años, asistió al acto y contó que fue víctima de la dictadura. “Hay una similitud entre el golpe militar y hoy porque quieren romper la ley. No queremos que las nuevas generaciones sufran eso también. Estamos luchando por la libertad de nuevo”, dijo.

En Recife, capital de Pernambuco, pancartas y carteles pedían la salida del presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, y del vicepresidente de la República, Michel Temer. Otros mensajes defendían políticas públicas creadas por el gobierno del PT. La mayoría de los manifestantes vestían rojo, pero muchos asistieron al acto de blanco y con banderas de Brasil. Durante la marcha, vecinos expresaron su apoyo desde las ventanas de los edificios.

El acto en la capital de Minas Gerais, Belo Horizonte, fue organizado por una red de artistas y recibió el título de “Canción por la democracia”. Músicos, políticos y líderes de movimientos sociales compartieron el escenario instalado en la Praça da Estação, centro de la ciudad. Según la policía militar, la manifestación reunió a 10 mil personas. Los organizadores dicen que fueron 40 mil.

El músico Bruno Tonelli, de 29 años, pertenece al grupo Tribalzen y dijo que asistían al acto “blancos, negros, indios, rojos, verde-amarillos, todos los colores y razas”. “Reunidos en defensa de algo que hemos conseguido muy tarde en Brasil, que es la democracia”, subrayó.

Traducción: Leonardo Vieira