Acuerdos entre Brasil y China incluyen la venta de aviones de Embraer

China, el mayor socio comercial de Brasil, con un intercambio que alcanzó US$ 90 000 millones el año pasado, pretende ampliar las relaciones con el país y actuar de forma coordinada en los organismos multilaterales internacionales. Tras la ceremonia de firma de acuerdos bilaterales con la mandataria Dilma Rousseff, el presidente chino Xi Jinping defendió también una “ampliación de los consensos".

Jinping espera que los acuerdos firmados en esta visita a Brasil permitan el "aumento continuo" del comercio bilateral. Reveló que China está muy interesada en invertir en obras en el área de infraestructura, logística, petróleo, mineral de hierro y agricultura. "Estamos dispuestos a cooperar estratégicamente para la construcción de ferrocarriles y también para buscar el desarrollo en el área de tecnología e internet, incrementando nuestra cooperación comercial en todas los ámbitos: en la ONU [Organización de las Naciones Unidas], en la OMC [Organización Mundial del Comercio], en el G20 [Grupo de las 20 mayores economías del mundo] y en los BRICS [grupo conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica."

Para Jinping, China y Brasil, como "importantes países del mercado emergente, que se constituyen como Estados clave del desarrollo”, pueden impulsar también el progreso de los demás países en vías de desarrollo. "Con esta visita, estoy seguro de que Brasil y China seguirán avanzando por el camino del desarrollo, enfrentando los retos y compartiendo oportunidades con el objetivo de utilizar su desarrollo para fomentar el crecimiento de todos los países emergentes”, afirmó Jinping.

A su vez, la presidenta Dilma Rousseff destacó la buena disposición china para invertir en sectores estratégicos en Brasil, como el de la energía, a través de asociaciones para la construcción de plantas hidroeléctricas y líneas de transmisión; y también los de petróleo y aviación, con la compra de aviones fabricados por la Empresa Brasileña de Aeronáutica (Embraer).

Las relaciones entre Brasil y China son prometedoras, según Rousseff. "La visita del presidente chino marca el 40 aniversario de las relaciones diplomáticas entre los dos países. El balance no podría ser más positivo, y nuestro futuro no podría ser más prometedor. Nuestras relaciones reescriben una asociación estratégica en diversas áreas de cooperación".

La mandataria presentó a Jinping oportunidades de negocio en licitaciones de ferrocarriles y aerovías. "En este sentido, destacamos el memorando de entendimiento sobre la cooperación ferroviaria. Le dejé claro al presidente Xi Jinping mi expectativa respecto a la participación de empresas chinas en los proyectos brasileños de infraestructura y logística."

De acuerdo con la jefa de Estado, la cooperación industrial entre los dos países se estrechará tras el anuncio de una inversión de US$ 300 millones por parte de la compañía china Sany para fabricar máquinas destinadas al sector de construcción en una planta en Jacareí, São Paulo, y de la instalación de otra planta del fabricante de automóviles Chery en la misma localidad. Cada empresa generará mil puestos de trabajo, informó Rousseff.

Traducción: Lucas Magdiel