Justicia notifica a Zara por seguir con trabajo esclavo

La marca Zara, perteneciente al grupo español Inditex, que produce y vende ropas masculinas y femeninas, fue notificada por el Ministerio de Trabajo y Empleo (MTE) por haber incumplido el acuerdo firmado en 2011 para inhibir el trabajo esclavo y violaciones de derechos laborales en su cadena de producción.

Según informaciones del MTE, una auditoría con 67 proveedores de la marca, realizada entre agosto de 2014 y abril de este año, mostró 433 irregularidades en todo el país, como exceso de horas de trabajo, retrasos en los pagos, aumento de accidentes de trabajo, trabajo infantil, además de discriminación contra los trabajadores inmigrantes. El informe muestra que más de 7 mil trabajadores se vieron afectados por las irregularidades en los proveedores de Zara, que incluyen también la falta de registro de empleados y de depósitos en el Fondo de Garantía por Tiempo de Servicio (FGTS), el fondo que garantiza los derechos laborales de indemnización y jubilación.

La auditoría fue solicitada por la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) de la Asamblea Legislativa de São Paulo que trata del trabajo esclavo en el estado. Según el ministerio, la empresa no solo continuó cometiendo violaciones de la ley laboral como utilizó la información de la auditoría para excluir a los inmigrantes de la producción, en lugar de hacer lo que determina el acuerdo de 2011, es decir, identificar proveedores con riesgo potencial de explotación laboral análoga a la esclavitud y situaciones reales de violación de derechos humanos, corregirlas y comunicarlas a las autoridades.

De acuerdo con los cálculos del ministerio, la empresa debe pagar US$ 8,2 millones por incumplimiento del acuerdo y US$ 281 mil por actitud discriminatoria. El ministerio estima que 157 inmigrantes, principalmente bolivianos, que trabajaban en 35 talleres fueron despedidos y unos 3,2 mil puestos de trabajo fueron extinguidos en São Paulo debido al desplazamiento de la compañía a otros estados.

En respuesta a la ONG Repórter Brasil, que publicó un reportaje sobre el caso, Inditex informó que está contestando legalmente las notificaciones de infracción, pues considera infundadas las acusaciones y sin un hecho específico de violación del acuerdo firmado. Respecto al exceso de horas y deudas del FGTS, la compañía afirma que se tomaron las medidas correctivas.

En cuanto a la práctica discriminatoria, la multinacional dice que no interviene en la contratación de empleados de las empresas con las que tiene relación comercial. Añade que Zara es solo uno de los muchos clientes de estos proveedores y que la empresa representa menos que el 15% de la producción de estos fabricantes.

Acerca del proveedor que fue sorprendido empleando mano de obra esclava después de firmado el acuerdo de 2014, Inditex dice que lo sometió a una auditoría interna y no se encontraron situaciones de trabajo análogo a la esclavitud. Según la empresa, cuestionar la auditoría es poner en duda el dictamen de una auditoría privada “de reconocido prestigio internacional”.

Traducción: Leonardo Vieira