Censo en São Paulo revela a inmigrantes en situación de calle

El Censo de la Población de Calle, divulgado por la Secretaría de Asistencia y Desarrollo Social de la Alcaldía de São Paulo reveló que la presencia de inmigrantes en situación de la calle –el 7% en refugios y el 1% en las calles– es un fenómeno social relativamente reciente en la ciudad. “Esos extranjeros son procedentes principalmente de países africanos y al llegar a la ciudad buscan servicios de asistencia social”, informa el documento.

Aunque conforman un grupo relativamente pequeño, el relevamiento prevé una tendencia al alza en un futuro próximo, puesto que la capital ha experimentado una creciente afluencia de refugiados procedentes de países que enfrentan dificultades económicas, así como conflictos de carácter político, étnico y religioso.

El censo ya había sido divulgado el año pasado, pero no fue hasta el pasado miércoles (20) que las autoridades municipales dieron a conocer el perfil socioeconómico de la población sin hogar. En São Paulo, un total de 15.905 personas viven en situación de calle, 8.570 de las cuales en centros de acogida y 7.335 en vías y espacios públicos.

Los migrantes procedentes de la propia Región Sureste, donde se ubica la ciudad, bien como del Nordeste, corresponden al 71% del total de personas en situación de calle y al 73,4% del total de personas alojadas en centros de atención.

Según el sondeo, en ambos segmentos, predominan los hombres (88%), con una edad promedia de 43 años en el primer grupo y de 41 en el segundo. En cuanto al color de la piel, el 69,7% de los individuos acogidos y el 72,1% de aquellos que viven en la calle se describen como “no blancos”, es decir, son pretos, pardos, amarillos o indígenas.

El nivel de educación es bajo. Un 9,6% de los habitantes de calle son analfabetos, ante un 7,1% de los acogidos. El porcentaje de aquellos que completaron la escuela primaria también es reducido: poco más del 15% en ambos grupos. Además, solo se graduaron en la enseñanza secundaria el 20,9% de los acogidos y el 16,6% de los habitantes de calle encuestados.

Más de la mitad de la población en situación de calle ya fue internada en alguna institución, sobre todo prisiones y clínicas de recuperación para alcohólicos y drogadictos, según muestra el sondeo. Entre los acogidos, el 27,5% ya fueron encarcelados, mientras el 30,5% fueron internados en clínicas de recuperación y el 11% en instituciones psiquiátricas. Diez por ciento fueron recluidos en la fundación Casa (Centro de Atención Socioeducativa al Adolescente). Con respecto a los que viven en las calles, el 40% ya han estado presos, el 32,8% ya han pasado por centros de rehabilitación y otros 12% por la fundación Casa.

Salud

Los problemas más mencionados durante la recolección de datos fueron los relativos a la salud bucal (el 27,5% de los acogidos ante el 34,5% de los habitantes de calle), secuelas de accidentes (26% y 26,7%), VIH (3,3% y 4,5%) y tuberculosis (3,9% y 4,5%).

Con respecto al uso de sustancias psicoactivas, el censo encontró que la más utilizada es el alcohol: el 44,6% de los acogidos y el 70,1% de los habitantes de calle admitieron haberlo consumido. En cuanto a los usuarios de drogas ilícitas, la tasa reportada fue del 28,7% en el primer grupo y del 52,5% en el segundo.

Según las autoridades municipales, además de analisar el estado de salud de las personas sin hogar, el estudio abarcó el uso de servicios públicos de salud. Los datos revelaron que la mayoría de los acogidos y de los habitantes de calle acudieron a servicios e instalaciones de atención básica –71,3% y 57,6% respectivamente–.

Violencia

La población en situación de calle también es víctima de diversas formas de violencia, desde la agresión verbal a intentos de asesinato. Tanto los individuos que viven en centros de atención como los que viven en las calles reportaron haber sufrido agresiones verbales como injurias, insultos y humillación (55% y 70% respectivamente), robo o hurto (59% y 64%), agresión física (38% y 50%), intento de asesinato con arma blanca o de fuego (16% y 24%), desalojo forzado (25% y 38%) y violencia sexual (4% y 6%).

Los autores de las agresiones son en su mayoría otros habitantes de calle, agentes de seguridad pública (de las policías civil y militar, bien como de la guardia municipal), agentes de seguridad privada y peatones.

Traducción: Lucas Magdiel