ONU: crisis económica pone trabas al desarrollo humano en Brasil
La caída en la renta nacional bruta en 2015 provocó un estancamiento del índice de desarrollo humano en Brasil, pese a una pequeña mejora en indicadores como esperanza de vida y educación. Así lo muestra el Índice de Desarrollo Humano (IDH), del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), divulgado este martes (21).
De acuerdo con el PNUD, tomando en cuenta el recálculo que se hace periódicamente para ajustar los nuevos indicadores a los nuevos datos internacionales y posibles cambios de metodología, Brasil quedó en el puesto 79 en el ranking de 188 países, tras marcar los mismos 0,754 puntos.
El resultado es fruto de un cruce de datos provenientes de diversos organismos nacionales e internacionales. Cuando más cercano a 1, mejor será la ubicación en la tabla, que hace años está encabezada por Noruega, país escandinavo que entre 2014 y 2015 saltó de 0,949 0,944 puntos, lo que lo coloca por delante de los otros 50 países que PNUD califica como de alto desarrollo humano, entre los cuales solo se cuentan dos latinoamericanos: Chile (puesto 38 del ranking) y Argentina (45)–.
A su vez, Brasil forma parte del grupo de 55 países considerados como de alto desarrollo humano. En América Latina y el Caribe, además de Chile y Argentina, Brasil está por detrás de Barbados y Uruguay (empatados en la posición 54); Bahamas (58); Panamá (60); Antigua y Barbuda (62); Trinidad y Tobago (65); Costa Rica (66); Cuba (68); Venezuela (71) y México (77).
En el caso de Brasil, los resultados evidencian los efectos de las crisis económica y política que afectan al país desde 2014. Según el PNUD, más de 29 millones de personas salieron de la pobreza entre 2003 y 2013. Sin embargo, el nivel de pobreza volvió a crecer entre 2014 y 2015, cuando unos 4 millones de personas ingresaron a la pobreza. En el mismo período, la tasa de desempleo también subió, alcanzando a más de 12 millones de personas. Además la situación es más grave entre mujeres y jóvenes.
Ante ese panorama, que también se ve en otras partes del mundo, incluso en economías desarrolladas, el PNUD recomienda a los países que adopten políticas públicas universales, afirmativas, que fortalezcan la seguridad social y den voz a los excluidos.
“Debemos garantizar la consistencia de las mejoras [sociales y económicas] con el fin de proteger a quienes han mejorado su vida para que no vuelvan a la situación de pobreza en caso de una recesión económica o choque”, comentó Andrea Bolzon, coordinadora del Informe Nacional de Desarrollo Humano Nacional, agregando que, en todo el mundo, las redes de seguridad social y los programas de transferencia condicionada de ingresos ayudan a paliar las malas condiciones en las que viven los más pobres.
“De nada sirve pensar solamente en el crecimiento económico a cualquier precio. En el pasado, Brasil ha crecido a tasas muy altas, mientras mantenía una alta tasa de pobreza. Ahora, el país necesita volver a crecer con mucho cuidado, promoviendo la inclusión de las personas sin concentrar el resultado de ese crecimiento”, dijo la coordinadora.
Para Bolzon, Brasil tiene que reanudar su actividad económica sin perder de vista la necesidad de mantener la seguridad social a un buen nivel. Y si es necesario revisar ese nivel, hay que hacerlo con cuidado, pues esas políticas y acciones sirven como un colchón en momentos de crisis como el actual. En su opinión, restar importancia a la seguridad social bajo el argumento de que es necesario crecer a toda costa puede suponer un precio muy alto que pagar en el futuro.
Traducción: Lucas Magdiel
Fonte: ONU: crisis económica pone trabas al desarrollo humano en Brasil