Brasil mantiene su tipo básico de interés al 2% anual
En medio del aumento de la inflación en los precios de alimentos y que comienza a extenderse a otros sectores, el Banco Central (BC) de Brasil no modificó las tasas de interés básicas de la economía. Por unanimidad, el Comité de Política Monetaria (Copom) mantuvo la tasa Selic al 2% anual. Los analistas financieros ya esperaban la decisión.
En un comunicado, el Copom reiteró que el efecto de los precios de los alimentos es temporal, pero destacó que la inflación debe mantenerse alta en los próximos meses. "A pesar de la mayor presión inflacionaria en el corto plazo, el comité mantiene el diagnóstico de que los choques actuales son temporales, pero continúa monitoreando de cerca su evolución, en particular las medidas de inflación subyacente”, dice el texto.
El Copom estimó que la inflación oficial terminará 2020 al 4,3% y bajará al 3,4% en 2021 y 2022. Este escenario asume un dólar a partir de R$ 5,25 y evoluciona según el poder adquisitivo internacional, además de las tasas de interés básicas al 2% anual a finales de 2020, al 3% anual durante 2021 y al 4,5% anual en 2022.
Con la decisión de ayer (9), la Selic se encuentra en el nivel más bajo desde el inicio de la serie histórica del Banco Central, en 1986. En julio de 2015, la tasa alcanzó el 14,25% anual. En octubre de 2016, el Copom volvió a reducir las tasas de interés básicas de la economía hasta que en marzo de 2018 la tasa alcanzó el 6,5% anual. En julio de 2019, la Selic se redujo nuevamente hasta alcanzar el 2% anual en agosto de este año.
Inflación
La Selic es el principal instrumento del Banco Central para mantener bajo control la inflación oficial, medida por el Índice Nacional Amplio de Precios al Consumidor (IPCA). En los 12 meses terminados en noviembre, el indicador cerró al 4,31%. En aceleración debido a la subida de los precios de los alimentos, el IPCA superó, en el acumulado de 12 meses, el centro de la meta establecida por el Consejo Monetario Nacional (CMN), lo que no sucedía desde febrero de este año.
Para 2020, el CMN ha fijado una meta de inflación del 4%, con margen de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales. El IPCA, por tanto, no puede superar el 5,5% este año ni bajar del 2,5%. El objetivo para 2021 se fijó en 3,75%, también con un intervalo de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales.
En el Informe de Inflación publicado a fines de septiembre por el Banco Central, la autoridad monetaria estimó que el IPCA cerraría el año al 2,1% en el escenario base. La estimación será actualizada la próxima semana, cuando salga el informe de diciembre.
La proyección se desactualizó debido al nuevo aumento de la inflación en los últimos meses. Según el boletín Focus, una encuesta semanal con instituciones financieras publicada por el BC, el pronóstico es que la inflación oficial cierre el año al 4,21%.
Crédito más barato
Mantener la tasa Selic en niveles bajos estimula la economía porque menores tasas de interés abaratan el crédito y estimulan la producción y el consumo en un escenario de baja actividad económica. En el último Informe de Inflación, publicado en septiembre, el Banco Central había proyectado una contracción del 5% para la economía este año. Esta fue la segunda proyección oficial de BC revisada después de que comenzó la pandemia de COVID-19.
El mercado pronostica una caída ligeramente menor. Según la última edición del boletín Focus, los analistas económicos proyectan una contracción del Producto Interno Bruto (PIB) brasileño en un 4,4% en 2020. El PIB es la suma de bienes y servicios producidos por el país.
Se utiliza el tipo básico de interés en la negociación de bonos públicos en el Sistema Especial de Liquidación y Custodia (Selic) y sirve como referencia para otras tasas de interés de la economía. Al reajustarlo al alza, el Banco Central contiene el exceso de demanda que presiona los precios, porque las tasas de interés más altas encarecen el crédito y estimulan el ahorro.
Al reducir las tasas de interés básicas, el Copom abarata el crédito y fomenta la producción y el consumo, pero debilita el control de la inflación. Para recortar la tasa Selic, la autoridad monetaria debe asegurarse de que los precios estén bajo control y no corran el riesgo de subir.