El Ministerio de Economía mantiene la previsión del PIB al +1,5%
El gobierno brasileño modificó al alza su pronóstico de inflación para este año. El Índice de Precios al Consumidor Amplio (IPCA), que en marzo se estimaba en un 6,55% para el año, ahora tuvo el pronóstico elevado al 7,9%. La estimación del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) pasó de 6,7% a 8,10%, y la del Índice General de Precios (IGP-DI), del 10,01% a 11,4%. La estimación para el Producto Interno Bruto (PIB) se mantuvo en +1,5%. Los datos, divulgados ayer (19), provienen del Boletín Macro Fiscal de la Secretaría de Política Económica (SPE) del Ministerio de Economía.
Para 2023, el gobierno federal también mantuvo su pronóstico del PIB y aumentó el de la inflación. Según la estimación, el PIB debe cerrar el próximo año con una subida del 2,5%. El IPCA debe terminar 2023 al 3,6% (el pronóstico de marzo fue del 3,25%); el INPC, al 3,7% (3,5% era la estimación de marzo); y el IGP-DI, al 4,57% (4,42%).
“La expectativa para la tasa de inflación [IPCA] aumentó del 6,55% a 7,90% en 2022 y del 3,25% a 3,60% en 2023. A partir de 2024 se espera una convergencia de la inflación [IPCA] a la meta de 3%. En relación al INPC, la proyección para el 2022 aumentó del 6,70% a 8,10%”, dice el texto del documento.
Según el boletín, la mejora en el desempeño del PIB brasileño se ha debido a la recuperación del sector servicios y a la expansión de las inversiones, lo que se ha reflejado en la recuperación del mercado laboral. El texto destaca que el sector servicios creció 1,8% en el primer trimestre de 2022, alcanzando el nivel más alto desde mayo de 2015.
“La estimación de crecimiento del PIB brasileño para 2022 se mantuvo al 1,5%. A partir de 2023, las estimaciones se han mantenido al 2,5 %. Desde marzo, en línea con las proyecciones de la SPE, se observa una revisión al alza de las expectativas del mercado sobre la actividad económica", dice el texto.
