Brasil reduce la desigualdad, pero 2,5 millones siguen fuera de la escuela
Todos por la Educación (TPE) es una organización sin fines de lucro compuesta por varios sectores de la sociedad brasileña. Tiene por objetivo asegurar el derecho a una educación básica de calidad para todos los ciudadanos hasta el 2022 
Entre 2005 a 2015, sectores vulnerables de la población accedieron más a la escuela, de acuerdo con una encuesta del movimiento Todos por la Educación (TPE). Ese aumento se registró principalmente entre negros y pardos, personas de bajos ingresos y pobladores rurales de entre 4 y 17 años de edad, y fue mayor que el registrado entre personas blancas, ricas y habitantes de zonas urbanas.
Todos por la Educación (TPE) es una organización sin fines de lucro compuesta por varios sectores de la sociedad brasileña. Tiene por objetivo asegurar el derecho a una educación básica de calidad para todos los ciudadanos hasta el 2022, año en el que se cumple el bicentenario de la independencia de Brasil.
La encuesta se basó en datos de la Encuesta Nacional por Muestreo de Domicilios (PNAD). En 2005, el 86,8% de las personas más pobres estaban en la escuela, contra el 97% de los más ricos. En 2015, esos índices aumentaron, respectivamente, al 93,4% y al 98,3%.
Entre los pobladores rurales, el acceso a la escuela aumentó del 83,8% al 92,5%, mientras que entre los habitantes de zonas urbanas ese índice pasó del 90,9% al 94,6%. El accesso creció más entre negros y pardos –la tasa pasó respectivamente del 87,8% al 92,3% y del 88,1% al 93,6%– que entre la población blanca –del 91,2 % al 95,3%–.
Para los representantes del movimiento, se ha producido un avance importante, aunque insuficiente, en la reducción de la desigualdad, ya que los sectores más vulnerables siguen siendo los que más concentran niños y jóvenes fuera de la escuela. “Son los que más necesitan la educación para superar la exclusión y la pobreza. Muchos son niños y jóvenes con discapacidades o que viven en zonas aisladas. Muchos tienen generaciones en sus familias que nunca pusieron un pie en la escuela”, dijo Priscila Cruz, presidenta ejecutiva del programa.
Bajo la ley brasileña, todos los niños y jóvenes con edades entre 4 y 17 años deben estar inscritos en la escuela. Según la Enmienda Constitucional 59 de 2009, Brasil tendría que universalizar la educación básica hasta el 2016.
Traducción: Lucas Magdiel
Fonte: Brasil reduce la desigualdad, pero 2,5 millones siguen fuera de la escuela
