Brasil inaugura nuevo centro de producción de medicamentos

El nuevo centro de producción de medicamentos, inaugurado el viernes (9) en una colaboración entre el Instituto de Tecnología de Inmunobiológicos (Bio-Manguinhos) y la Fundación Instituto Oswaldo Cruz (Fiocruz), beneficiará principalmente a los brasileños atendidos por el Sistema Unificado de Salud (SUS), que depende de productos biofarmacéuticos y kits de diagnóstico rápido. El anuncio fue hecho por el director de Bio-Manguinhos, Arthur Roberto Couto.

"En realidad, toda nuestra producción está orientada hacia el SUS", comentó, agregando que la producción de prototipos se centra en la cadena de innovación, integrada por universidades, centros de investigación y socios privados.

Cadena de producción completa

Según Couto, como parte de las Asociaciones de Desarrollo Productivo (PDPs, por sus siglas en portugués), dirigidas a la incorporación de tecnología, el nuevo centro facilita ese proceso, "porque era el vínculo que necesitábamos para dotar al país de una producción de productos biofarmacéuticos a nivel nacional, abarcando desde la materia prima hasta el producto final. Eso permitirá reducir considerablemente los costos, una vez que un laboratorio público está produciendo, suministrando y proveyendo acceso a un precio mucho menor".

De acuerdo con las cifras divulgadas por Bio-Manguinhos, el mercado internacional de medicamentos biológicos crece un 12% al año, y pone en circulación cerca de US$ 160 mil millones cada año. En Brasil, la inversión del Ministerio de Salud en la compra de productos farmacéuticos se elevó de US$ 2 mil millones a US$ 4,6 millones entre 2010 y 2015, y de este total, de los cuales el 51% se destinan a la compra de productos biológicos. Arthur Couto dijo que la expansión del mercado externo de biológicos es crucial pese al impacto significativo que tendrá sobre el SUS, ya que representa un salto cualitativo enorme respecto a las condiciones de hoy y puede ayudar a reducir o incluso a curar enfermedades como el cáncer y la artritis reumatoide. "Y eso es algo que el SUS requiere de nosotros".

Reducción de costes

Couto recordó que el papel de Bio-manguinhos como una empresa pública es ampliar la disponibilidad de productos a precios más bajos para hacerlos más asequibles a la población. "No debemos estar limitados por nuestros gastos, lo que sucede mucho".

Señaló que el déficit comercial de productos biofarmacéuticos ha alcanzado aproximadamente US$ 2 mil millones en 2015 y que hay un gran déficit en la atención médica, aunque cree que el nuevo centro puede ayudar a reducirlo. "Ahora cubriremos toda la cadena, desde la producción de las materias primas hasta el etiquetado y el suministro de los productos. Ese es un logro increíble. Tendremos productos ya listos para entrar en esta nueva planta".

El nuevo centro fue bautizado como Henrique Penna, en homenaje al investigador médico que trabajó en el desarrollo y la producción de la vacuna contra la fiebre amarilla en Brasil.

Traducción: Lucas Magdiel