Archivado el caso del tríplex contra Lula da Silva
La jueza suplente Pollyanna Martins Alves, del 12º Tribunal Federal de Brasilia, decidió ayer (27) archivar el caso del piso tríplex en Guarujá (São Paulo), en el que el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva fue acusado de los delitos de lavado de dinero y corrupción activa y pasiva, como parte de la Operación Autolavado.
La magistrada atendió a la petición de la Fiscalía Federal, que en diciembre solicitó el archivo antes de la prescripción de la demanda punitiva debido a la edad de Lula, que tiene 76 años.
Así, el exmandatario ya no puede ser castigado en una eventual condena. Según el Derecho Penal brasileño, el plazo de prescripción se reduce a la mitad cuando el acusado tiene más de 70 años. El mismo razonamiento se aplicó a los otros dos acusados en el caso: Leo Pinheiro, ex ejecutivo de la constructora OAS, y Paulo Okamoto, presidente del Instituto Lula en la época de los hechos investigados.
Lula fue condenado por el exjuez Sergio Moro, y su condena fue confirmada por el Tribunal Regional correspondiente y por el Tribunal Superior de Justicia (STJ). Sin embargo, la sentencia terminó siendo anulada en la Corte Suprema cuando Moro fue considerado incompetente para juzgar el proceso y luego parcial en el caso.
Tras la solicitud de archivo presentada por la Fiscalía, la defensa dijo que “el caso fue construido artificialmente a partir de la colusión entre el exjuez Sergio Moro y del exfiscal Deltan Dallagnol para detener al expresidente Lula, quitarlo de las elecciones de 2018 y atacar indebidamente su reputación, como siempre hemos sostenido”.
Moro se pronunció sobre el caso en las redes sociales. “Maniobras jurídicas han enterrado de una vez por todas el caso del tríplex de Lula, acusado en Autolavado. Los delitos de corrupción deberían ser imprescriptibles, porque el daño causado a la sociedad, que muere por falta de Salud adecuada, que no avanza en la Educación, no puede repararse nunca”, dijo.
En un comunicado, el exfiscal Deltan Dallagnol afirmó que la acusación de colusión es “absurda y fantasiosa”.