El Fondo Amazonia dará prioridad a la protección de pueblos indígenas
El Comité Orientador del Fondo Amazonia (COFA) se reinstaló en la sede del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), en Río de Janeiro, el miércoles (15), con la presencia de varios ministros. Interrumpido desde 2018, el comité es responsable de establecer criterios para la aplicación de los recursos del fondo. Está formado por representantes del gobierno federal, los gobiernos de estados y la sociedad civil.
El presidente del BNDES, banco gestor de los recursos del fondo, Aloizio Mercadante, dijo que en esta reanudación se deben financiar proyectos para proteger a los pueblos indígenas, controlar la deforestación, combatir la minería ilegal y promover el ordenamiento territorial en la región amazónica.
Según Mercadante, el fondo ya ha recibido R$ 3.300 millones en donaciones, de los cuales R$ 1.000 millones de Noruega, el mayor donante individual, y R$ 200 millones de Alemania. En total, el fondo acumula R$ 5.400 millones en donaciones, con R$ 1.800 millones ya contratados.
“El gran desafío es pasar de un modelo depredador a un modelo de desarrollo sostenible en la Amazonia. Y, para ello, necesitamos proyectos estructurantes que impulsen una nueva dinámica, una nueva industria, una agricultura baja en carbono, la recuperación de pastos degradados. Este es el gran objetivo estratégico del gobierno y del fondo. Hay 28 millones de personas que necesitan alternativas de vida", afirmó.
Nuevos donantes
La ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, dijo que el gobierno ha recibido señales de interés de Francia, España y la Unión Europea para donar recursos al Fondo Amazonia. La semana pasada, Estados Unidos también mostró interés en participar.
Para la ministra, el interés de grandes donantes muestra el retorno de la política ambiental brasileña, con participación y acciones de la sociedad civil, de la comunidad científica y de los gobiernos locales y federal.
Sobre la reinstalación del comité, Marina Silva informó que hay 14 proyectos, con fecha de 2018 y estimados en R$ 480 millones a R$ 600 millones, ya analizados y calificados para aprobación por el fondo y que podrán tener continuidad si es el deseo de los proponentes.
La ministra también anunció que el Plan de Prevención y Control de la Deforestación en la Amazonia Legal (PPCDAm) será revisado y actualizado hasta abril, aportando nuevas prioridades y asignación de recursos.
“Hemos priorizado, por unanimidad y dentro del foco de lo ya establecido, proyectos para atender la situación de emergencia de las comunidades tradicionales”, dijo la ministra, mencionando las comunidades indígenas Yanomami, Kayapó y Munduruku.
Día histórico
Para la ministra de Pueblos Indígenas, Sônia Guajajara, fue un día histórico. “Es muy importante y necesario reanudar el Fondo Amazonia para que podamos atender y sacar a los pueblos indígenas de esta emergencia en la que nos encontramos hoy, después de estos cuatro años de abandono por parte del gobierno federal", dijo la ministra, añadiendo que los pueblos indígenas son responsables de la protección del 82% de la biodiversidad mundial.
El ministro de Desarrollo Agrario y Agricultura Familiar, Paulo Teixeira, dijo que el fondo apoyará la reforestación de asentamientos en la Amazonia y también de áreas deforestadas ilegalmente en los últimos cuatro años.