Hace 150 años nacía Santos Dumont, precursor de la aviación
Quien embarca en São Paulo para hacer el principal puente aéreo de Brasil llega a Río de Janeiro en el aeropuerto Santos Dumont, inaugurado en 1936. Al pasar por la sala de llegadas – un gran espacio con ventanales de cristal que permiten una vista panorámica de las pistas, con la bahía de Guanabara al fondo – es difícil no fijarse en un gigantesco panel hecho por el artista carioca Cadmo Fausto. Primórdios da Aviação representa el vuelo de Santos Dumont con el 14-Bis en París, bajo la mirada de los curiosos, con la Torre Eiffel en el escenario.
En la salida principal del vestíbulo, el viajero se encuentra con un busto de Alberto Santos Dumont, obra del artista francés Hugues Desmazieres.
El panel, la escultura y el nombre del primer aeropuerto civil del país son homenajes al aviador que este jueves (20) tiene celebrados sus 150 años de nacimiento. Su propia ciudad natal, Palmira, es otro homenaje. En 1932, pasó a llamarse Santos Dumont.
El brasileño es considerado el Padre de la Aviación, reconocido por su pionero vuelo en una aeronave autopropulsada más pesada que el aire. La hazaña tuvo lugar en el Campo de Bagatelle, en París, el 23 de octubre de 1906.
Maurício Inácio da Silva, suboficial de la Fuerza Aérea e historiador del Museo Aeroespacial (Musal) de Río de Janeiro, afirma que Santos Dumont marcó una época.
"Fue un período de muchos descubrimientos, muchos inventos en todas las áreas. Santos Dumont hizo posible el vuelo del 14-Bis, más pesado que el aire. Para la época fue un éxito. Lo que hizo marcó una generación, quedará para siempre y sigue colaborando mucho con el progreso de la humanidad", dijo el historiador.
Pionero en el extranjero
Apasionado por la innovación, Santos Dumont ya coleccionaba logros aéreos antes del vuelo con el 14-Bis, como la construcción de un globo – el más pequeño jamás fabricado para el ascenso de una persona a bordo – que voló durante cinco horas, también en Francia, en julio de 1898. Con su espíritu pionero, Dumont continuó combinando motores de combustión interna con globos, construyendo ingeniosos timones, que dieron lugar al dirigible. En 1901 sobrevoló París en uno de ellos, atrayendo la atención de la prensa brasileña y mundial.
Habiendo vivido en París desde los 18 años, fue a orillas del río Sena donde observó un detalle que le permitió evolucionar de los globos al primer modelo de avión. En 1905, Dumont estaba viendo una carrera de lanchas rápidas, cuando se dio cuenta de que el motor de la lancha podría ser el generador de energía que permitiría al 14-Bis ser autopropulsado. Una adaptación que, tras pruebas y fracasos, resultó suficiente para el vuelo de 60 metros a 3 metros de altura ya el año siguiente.
El brasileño siguió desarrollando su máquina voladora. En 1909, despegó en su avión Demoiselle, uno de los primeros aeroplanos del mundo, similar a un ultraligero.
El Padre de la Aviación murió en 1932. Terminó con su propia vida en el Grand Hotel La Plage, en Guarujá, costa de São Paulo. Una de las razones apontadas para el suicidio sería su decepción con el uso militar de los aviones en la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y también aquí en Brasil.
"Cuando Santos Dumont se lanzó con estos inventos, sabía que podían ser utilizados en la guerra, pero pensó que el avión serviría como un observador aéreo para ubicar tropas y transportar personas. En la Primera Guerra Mundial, se sorprendió por su uso para bombardeos. La gota que colmó el vaso fue cuando, en Guarujá, vio que aviones del gobierno brasileño bombardeaban la ciudad de São Paulo, durante la Revolución Constitucionalista de 1932", dice el historiador Inácio da Silva.
