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Política

Bolsonaro recibe la banda, defiende la ética y el fin de la corrupción

Prometió “hacer que Brasil ocupe el lugar que merece en el mundo”
Agência Brasil
Publicado en 01/01/2019 - 19:53
Brasilia

Tras recibir la banda presidencial a finales de la tarde de hoy (1), el nuevo presidente brasileño, Jair Bolsonaro, hizo un discurso en el Palacio de Planalto, sede del gobierno, y propuso la creación de un “movimiento para restablecer patrones éticos y morales que transformarán el país”. Bolsonaro también defendió el fin de “la corrupción, los privilegios, las ventajas, los favores politizados, partidarios”.

“No podemos dejar que ideologías nefastas vengan a dividir a los brasileños. Ideologías que destruyen nuestros valores y tradiciones [...] nuestras familias. Invito a todos a restablecer los patrones éticos y morales que transformarán nuestro Brasil”, afirmó.

A primeira-dama Michelle Bolsonaro e o presidente Jair Bolsonaro durante cerimônia de transmissão da Faixa Presidencial, no Palácio do Planalto.
La primera dama Michelle y el presidente Jair Bolsonaro saludan al público tras la ceremonia de paso de la banda presidencial. - Marcelo Camargo/Agência Brasil

El nuevo jefe del Ejecutivo prometió “hacer que Brasil ocupe el lugar que merece en el mundo y traer paz y prosperidad para todos”. El momento más aplaudido del discurso ocurrió cuando Bolsonaro dijo que “el pueblo comenzó a libertarse del socialismo”.

Él aseguró que hará los cambios pedidos por la mayoría, respetando los principios del Estado democrático y la Constitución, y dijo que su gabinete de ministros está calificado para transformar el país, poniendo los intereses de los brasileños en primer lugar, que es el “propósito innegociable” de su gobierno.

Bolsonaro defendió que los brasileños tengan derecho a una vida mejor y a un gobierno honesto y eficiente. Entonces, volvió a decir que va a desburocratizar el Estado y mejorar la infraestructura del país, y reiteró que quiere “acabar con la ideología que defiende a bandidos y criminaliza a los policías”.

El mandatario prometió garantizar “la seguridad de las personas de bien y del derecho a la propiedad” y advirtió que la educación básica será priorizada. Al finalizar su discurso, mostró una bandera de Brasil y dijo: “Ésta es nuestra bandera, que nunca será roja. Si es necesario, [daremos] nuestra sangre para mantenerla verde y amarilla.”