Vacuna de Oxford podría ser distribuida este año, dice Astrazeneca
La vacuna contra la COVID-19, desarrollada por la Universidad de Oxford, en Inglaterra, con pruebas en Brasil, podría estar disponible para la población a finales de este año, dijo Maria Augusta Bernardini, directora médica del grupo farmacéutico Astrazeneca. El grupo anglosueco participa en la investigación de la universidad inglesa en asociación con la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp).
"Esperamos tener datos preliminares sobre la eficacia real ya disponibles alrededor de octubre o noviembre", dijo Bernardini el lunes (29), durante una conversación, transmitida en directo por Internet, con el embajador del Reino Unido en Brasil, Vijay Rangarajan. También dijo que, aunque los voluntarios serán observados durante un año, la vacuna podría ser distribuida a la población antes de que ese período termine.
"Analizaremos, junto con los organismos reguladores mundiales, si podemos tener un permiso de registro excepcional, un registro en condiciones especiales, para que podamos ponerla a disposición de la población antes de que se completen los estudios", agregó, señalando que los plazos pueden cambiar dependiendo de como progresen los estudios.
Fase de pruebas
La vacuna está actualmente en la fase tres de las pruebas. Eso significa, según la Unifesp, que la vacuna se encuentra entre las etapas más avanzadas de desarrollo. Brasil es el primer país fuera de Reino Unido en iniciar las pruebas con la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford, y una de las razones de la elección fue que la pandemia va en aumento en el país.
"Brasil es un importante foco de crecimiento y mortalidad, lo que nos sitúa como un entorno propicio para demostrar el efecto potencial de una vacuna. Para ello necesitamos que el virus circule entre la población y ese es el escenario en el que vivimos", dijo Bernardini.
La directora médica de Astrazeneca también señaló que la labor de los científicos brasileños en Oxford y su reputación juraron un papel importante en traer la investigación a Brasil. "Esto fortaleció la imagen, la reputación científica de Brasil, además de dar más agilidad a los estudios".
Una sola dosis
La vacuna Oxford, dijo Bernardini, tiene una ventaja sobre otras en desarrollo en el mundo porque, además de utilizar una plataforma ya conocida y probada en virus como el Mers y el Ébola, funcionaría con una sola dosis. "Estamos desarrollando una vacuna de una sola dosis. Es una ventaja. [...] Otra ventaja es que sabemos que el potencial de generación de anticuerpos es muy fuerte, muy positivo".