Prevención del suicidio: preocupa la salud mental de los jóvenes
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que más de 700 mil personas se quitan la vida cada año en el mundo. La cifra podría alcanzar el millón si se tienen en cuenta los casos no registrados. En Brasil se producen aproximadamente 14 mil suicidios al año, una media de 38 personas al día.
El 10 de septiembre se celebra el Día Mundial para la Prevención del Suicidio. Los expertos señalan que la mayoría de los casos de suicidio están relacionados con trastornos mentales, como la depresión, y advierten de que estos problemas se manifiestan a una edad cada vez más temprana.
Según el psiquiatra Rodrigo Bressan, presidente del Instituto Ame Sua Mente, las investigaciones demuestran que el 75% de los trastornos mentales en adultos comienzan antes de los 24 años. En el caso de los adolescentes, la mitad comienza antes de los 14 años. "Acabamos viendo a gente deprimida entre los 20 y los 30 años, pero en realidad la mayoría de las enfermedades empezaron mucho antes", afirma.
Uno de los problemas que ha ido apareciendo cada vez antes es la autolesión. Un estudio sobre la Estructura del Yo y la Personalidad de los Adolescentes que se Autolesionan, realizado por la Universidad Federal Fluminense (UFF), analizó los casos de 61 alumnos de entre 10 y 16 años. Además de mostrar que el 83% de los casos parecen ocurrir debido a conflictos familiares no resueltos, también reveló que la mayoría están asociados a la depresión. "Encontramos una tasa de correlación del 65%", afirma el doctor en psicología Antonio Augusto Pinto Junior, coordinador del estudio. En su opinión, es necesario seguir investigando para comprender mejor la asociación entre depresión y autolesiones.
Según Antonio Augusto, este tipo de comportamiento empieza a aparecer a una edad cada vez más temprana, en torno a los 10 años. Este fue el caso de Clara, la hija de Gabriela (nombres ficticios), que empezó a mostrar este comportamiento en torno a los 10 u 11 años. "Me empezó a llamar la atención que llevara una sudadera, y fue entonces cuando me di cuenta de que se automutilaba y me preocupé mucho. También mostraba conductas de querer quitarse la vida, que todo era muy difícil para ella, que la gente no la entendía", cuenta Gabriela, que envió a su hija a recibir atención médica. El diagnóstico fue depresión. Hoy Clara está controlada, medicada y vive feliz, según su madre.
Como Clara, quienes se autolesionan suelen cubrirse los brazos y las piernas con ropa de manga larga, como sudaderas. Según el estudio de la UFF, las partes del cuerpo elegidas para autolesionarse en la mayoría de los casos son los brazos, las manos o las muñecas: el 94,1%. En el 88,5% de los casos se utilizan objetos punzantes como cuchillas y sacapuntas.
Pedidos de ayuda
Para la psicóloga Karen Scavacini, del Instituto Vita Alere para la prevención del suicidio, las autolesiones suelen ser un grito de auxilio. Según ella, hay algunos jóvenes que experimentan este comportamiento por curiosidad, lo que también requiere atención. Si esto ocurre repetidamente, hay que entender la alarma.
En estos casos, dice, el joven puede estar sufriendo acoso, ciberacoso, abuso físico, sexual o de sustancias. Karen Scavacini señala que el adolescente también puede estar sufriendo algún problema psiquiátrico no identificado o no tratado, como cambios de humor, cambios de personalidad, trastornos alimentarios, ansiedad, depresión o incluso problemas relacionados con la sexualidad, la vulnerabilidad social y los conflictos familiares.
"Lo que estamos viendo es una baja tolerancia a la frustración. Y la autolesión es vista como una forma de alivio", explica la psicóloga.
Rodrigo Bressan afirma que, cuando el sufrimiento es muy intenso, puede haber una relación entre las autolesiones y el suicidio. Estos casos suelen estar asociados a la depresión. "Alguien que se autolesiona está sufriendo mucho emocionalmente. Tenemos que recordar que el 90% de los casos están asociados a un diagnóstico psiquiátrico, sobre todo depresión, y lo más importante es que tenemos que tratar lo que hay detrás."
Un cambio de comportamiento, un descenso del rendimiento escolar, un aislamiento constante en el grupo de amigos, la aparición de un corte, una quemadura, un hematoma, llevar manga larga incluso cuando hace calor pueden ser señales.
El papel de padres y profesores
En la mayoría de los casos, es el profesor quien diagnostica o identifica la práctica de la autolesión. "Esto señala la necesidad de capacitación, formación y educación de los profesores, entendiendo la escuela como puerta de entrada para la identificación precoz de diversas formas de malestar psicológico en la infancia y la adolescencia", afirma el psicólogo Antonio Augusto.
Rodrigo Bressan afirma que hablar con adolescentes en situaciones como ésta es siempre delicado. No se puede adoptar una postura arrogante ni utilizar etiquetas. Tampoco hay que decir que la persona está haciendo algo mal o que está "loca". No se puede crear barreras, sino mostrar la percepción de un comportamiento diferente.
"Hay que darle al adolescente la propiedad de la conversación. Cuando ellos llevan la batuta, aumentan las posibilidades de que se abran a hablar". Bressan cree que "cualquier comentario de juicio, aunque sea entre líneas, aleja a los adolescentes".
Para Karen Scavacini, el Septiembre Amarillo, mes en que se celebra la campaña de sensibilización para la prevención del suicidio, es una oportunidad para que las escuelas y los padres debatan el tema de la salud mental. Según la psicóloga, se puede entablar una conversación en torno a una película o una serie. "Si te das cuenta de que ese joven necesita ayuda, lo ideal es ofrecer una escucha, acogerlo", afirma.
El apoyo psicológico a niños y adolescentes en las escuelas también es una de las prioridades en las acciones desarrolladas por el Departamento de Salud Mental, creado en esta gestión del Ministerio de Salud, según el psiquiatra Marcelo Kimati, asesor técnico del departamento, quien destaca la ampliación de la red de salud mental del país: "Hemos desbloqueado una cola que estaba atascada en el último año, en el que no tuvimos nuevos servicios para niños y adolescentes."
El Ministerio de Salud ha aumentado el presupuesto para la Red de Atención Psicosocial con una inversión de más de R$ 200 millones en 2023. Los fondos destinados a los estados y al Distrito Federal ascienden a R$ 414 millones en el período de un año.
*Contribución de Dayana Victor, de la Radio Nacional