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Desfiles tradicionales llevan humor, ironía y crítica social a las calles de Río

El “bloco” de Carmelitas, que homenajea un convento de monjas, abre la
Nielmar de Oliveira – Reportero de Agência Brasil
Publicado en 08/02/2018 - 16:48
Río de Janeiro
Rio de Janeiro -  Blocos carnavalescos participam da abertura do carnaval não oficial neste domingo (7), no centro da cidade (Fernando Frazão/Agência Brasil)
© Fernando Frazão/Agência Brasil
Rio de Janeiro - Blocos carnavalescos participam da abertura do carnaval não oficial neste domingo (7), no centro da cidade (Fernando Frazão/Agência Brasil)

A partir del viernes (9), se espera que más de una decena de “blocos”, como se conocen las comparsas carnavalescas en Brasil, lleven buen humor, ironía y crítica social a las calles.Fernando Frazão/Agência Brasil

A partir del viernes (9), se espera que más de una decena de “blocos”, como se conocen las comparsas carnavalescas en Brasil, lleven buen humor, ironía y crítica social a las calles de Río de Janeiro hasta el último día de fiestas, el próximo martes (13).

Las fiestas arrancarán con el bloco de Carmelitas y sus seis mil juerguistas, que tomarán el pequeño barrio de Santa Teresa, en la zona central de la ciudad. La comparsa rinde homenaje al Convento de las Carmelitas, que, según se cree, habría fundado el barrio. Juerguistas y admiradores del barrio crearon una leyenda sobre una monja que cada año salta el muro de su monasterio para disfrutar del Carnaval el viernes y solo regresa a la clausura el martes.

La historia se convirtió en una tradición: hombres y mujeres se ponen el hábito de una monja –o al menos el velo– para que la monja fugitiva pueda juguetear en paz sin que la reconozcan.

Después de atraer a más de 250 mil personas el último sábado (2) con una samba llena de críticas dirigidas al alcalde Marcelo Crivella y su administración, la comparsa “Simpatia É Quase Amor” desfilará por segunda vez el domingo por la tarde.

 

Traducción: Lucas Magdiel


Fonte: Desfiles tradicionales llevan humor, ironía y crítica social a las calles de Río