El crecimiento de América Latina caerá al 1,8% por guerra e inflación
Las incertidumbres causadas por la guerra en Ucrania se reflejan en inflación y volatilidad del sistema financiero, por lo que las economías de América Latina y el Caribe deberán crecer menos en 2022, publicó ayer (27) la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). La agencia, vinculada a la Organización de las Naciones Unidas, redujo la previsión de crecimiento para la región este año del 2,1% al 1,8%.
Para Brasil, la estimación de aumento del Producto Interno Bruto cayó del 0,5% al 0,4% en 2022, por debajo del promedio del continente sudamericano. La previsión de crecimiento de las economías sudamericanas subió ligeramente, del 1,4% al 1,5%, gracias a la mejora de las previsiones en varios países vecinos.
La estimación de crecimiento económico pasó del 2,2% al 3% en Argentina; del 3,7% al 4,8% en Colombia; del 3,1% al 3,9% en Uruguay; y del 3% al 5% en Venezuela. Por otro lado, bajó del 1,9% al 1,5% en Chile y del 3% al 2,5% en Perú.
El resto de América Latina también se enfrenta a la desaceleración económica. La CEPAL ha revisado su previsión de crecimiento para América Central y México del 3,3% al 2,3%. Para el Caribe (excluida Guyana), la estimación bajó del 6,1% al 4,7%.
En un comunicado, la Comisión informó que las economías de América Latina y el Caribe se enfrentan a una situación compleja en 2022 debido al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Para la agencia, a nivel regional, el menor crecimiento previsto irá acompañado de una mayor inflación y una lenta recuperación del empleo. La CEPAL también pronostica que la desaceleración económica de Estados Unidos, China y la Unión Europea afectará a las exportaciones latinoamericanas, debido a la menor demanda externa por productos de la región, como consecuencia del conflicto.