Tecnologías de reconocimiento facial se difunden en Brasil

Un total de 37 ciudades ya utilizan la nueva técnica en el país

Publicado en 20/09/2019 - 10:23 Por Jonas Valente* - São Paulo

Brasil es el hogar de 37 países que han adoptado alguna forma de tecnología de reconocimiento facial. Más de la mitad de las iniciativas –19– se lanzaron entre 2018 y 2019. Las soluciones se suelen utilizar en las áreas de seguridad pública, transporte y control de fronteras.

El sondeo fue realizado por el Instituto Igarapé, una organización independiente dedicada a la integración de las agendas de seguridad, justicia y desarrollo, y presentada el jueves (19) en el 10.º Seminario sobre Privacidad y Protección de Datos Personales, un evento organizado por el Comité Directivo de Internet de Brasil. El estudio trazó un mapa de las iniciativas desde 2011, en todo el país.

Tema controvertido

Las autoridades han estado apostando por el reconocimiento facial como una herramienta de control sofisticada para las políticas públicas. El tema, sin embargo, es polémico, ya que plantea cuestiones relativas a la violación de la privacidad y control civil. La tecnología ha sido prohibida en ciudades de los Estados Unidos, como San Francisco y Oakland, en California.

Sin embargo, los gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, e incluso gigantes de la tecnología como Microsoft ya han defendido la regulación de la práctica.

Nada nuevo bajo el sol

La investigadora Louise Marie Hurel, del Instituto Igarapé, señaló que la aplicación de este método de identificación no es ninguna novedad. En 2004, un proyecto de ley del entonces diputado Eduardo Paes, exalcalde de Río de Janeiro, pretendía regular el uso de la biometría facial para autenticar el acceso a datos fiscales. A principios de esta década, las ciudades comenzaron a recurrir a esta tecnología.

Los primeros proyectos se centraron en el transporte. Autobuses de empresas intermunicipales establecieron el reconocimiento como una condición para los usuarios. Este sector fue responsable de 21 proyectos encuestados por el estudio. En los últimos años, la tecnología ha cobrado un impulso especial en el ámbito de la seguridad pública, como el acceso a las instalaciones vigiladas. Otras trece iniciativas identificadas comparten los mismos objetivos.

No sólo los gobiernos, sino también las empresas se han sumado a la tendencia. La concesionaria de una de las líneas de metro de São Paulo ha instalado cámaras para medir el estado de ánimo de los pasajeros a través de sus expresiones faciales, de modo que se puedan mostrar anuncios más apropiados. Hering, una cadena de ropa brasileña, colocó sistemas similares en una de sus tiendas de São Paulo para examinar las actitudes, intereses y prácticas de los consumidores como un elemento a tener en cuenta al diseñar estrategias de marketing.

Proyectos de ley

La difusión de esta innovación ha suscitado preocupación entre las autoridades. El sondeo identificó dos proyectos de ley sobre el tema en el Congreso brasileño y 21 en las asambleas legislativas de los estados, ocho de los cuales en Río de Janeiro y dos en São Paulo. "El reconocimiento de los rostros se ha convertido en una bala de plata para la seguridad pública", señaló la investigadora Marie Hurel.

Uno de los proyectos de ley bajo escrutinio en el Congreso hace obligatorio el reconocimiento facial en los establecimientos penitenciarios. La otra parte de la legislación también estipula el uso de la tecnología para los trabajadores penitenciarios e incluso para los abogados que entran y salen de los centros penitenciarios.

Riesgos

Rafael Mafei, profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad de São Paulo (USP), destacó los riesgos de este método de identificación. En su opinión, "el reconocimiento facial es tan peligroso cuando se utiliza de forma inapropiada que no merece la pena hacerse popular". Esta podría ser la tecnología de ensueño de los gobiernos autoritarios".

La abogada Bárbara Simão, del instituto brasileño de derechos del consumidor Idec, señaló que las encuestas realizadas por institutos de investigación en países como Estados Unidos y el Reino Unido indican una baja confianza en esta tecnología entre el público. En una de las encuestas, sólo un siete por ciento estuvo de acuerdo en que esta tecnología podría utilizarse en la selección de anuncios personalizados.

Al decidir implementar el método, las empresas deben tener en cuenta una serie de criterios, dijo la abogada. La primera es si realmente puede ser un activo, y si la identificación puede llevarse a cabo por otros medios. La segunda se refiere a la transparencia de la operación. La tercera es sobre el respeto de las elecciones de las personas, en lugar de adoptar el reconocimiento facial como una imposición.

Cómo funciona

El reconocimiento facial comienza con la recopilación de la imagen de un individuo. A continuación, un proceso denominado "normalización", en el que las personas se clasifican según patrones. Sus características se transforman en puntos de referencia para el análisis. Estos datos son tratados y vinculados a la identidad de la persona en cuestión.

En los servicios de autenticación, por ejemplo, las cámaras producen imágenes mientras el sistema intenta encontrar una cara compatible en su base de datos.

* El reportero viajó a São Paulo por invitación del Comité Directivo Brasileño de Internet y del Centro de Información y Coordinación de Ponto BR.

Traducción: Lucas Magdiel -  Edición: Fernando Fraga/Augusto Queiroz

Últimas noticias