Brasil desperdicia 40% del agua potable recolectada de manantiales
Brasil desperdicia casi cuatro de cada 10 litros de agua que deberían ser entregados a la población por las empresas de abastecimiento. Es agua potable recogida de manantiales, pero no llega a los hogares de las personas. Las cifras provienen del Sistema de Información Nacional de Saneamiento (SNIS) y se refieren a 2021.
Las pérdidas disminuyeron, pero poco. En 2020 representaban el 40,1% de todo lo recolectado; en 2021, el 39,3%.
El objetivo del Ministerio de Desarrollo Regional es que el desperdicio total no supere el 25% en 2034. Según cálculos del coordinador de Gestión Integrada del ministerio, Paulo Rogério dos Santos, "si hoy redujéramos ese porcentaje de pérdidas al 25%, dejaríamos de gastar R$ 6 mil millones al año. Entonces, es un monto importante. Es una práctica que necesitamos corregir o al menos mejorar lo antes posible".
Para el secretario ejecutivo de la Asociación Brasileña de Empresas Estatales de Saneamiento, Sérgio Gonçalves, se trata de dinero desperdiciado que podría invertirse en la mejora del sistema.
Las mayores pérdidas están en el Norte, donde se desperdicia más de la mitad, el 51% de lo capturado, y en el Nordeste, donde alcanzan el 46%. Incluso en el Sudeste, que tiene la mayor cobertura de abastecimiento, el desperdicio se sitúa al 38%.
El volumen de agua desechado sería suficiente para atender al 100% de la población brasileña. Hoy en día, la cobertura con agua entubada ronda el 84%.
