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Animales domésticos tendrán derecho a documento de identidad en Brasil

La herramienta estará accesible a través de la Internet
Andreia Verdélio – Reportera de la Agência Brasil
Publicado en 28/12/2024 - 09:23
Brasilia
Pets ensaio Natalino
© Divulgação/Vale.

El sistema para el Registro Nacional de Animales Domésticos ya está en su fase final de pruebas y deberá estar pronto en funcionamiento para que los dueños de mascotas puedan registrarlas y emitir la tarjeta de identificación animal de forma gratuita. Según el Ministerio de Medio Ambiente (MMA), se podrá acceder a la herramienta a través de la cuenta Gov.br, el portal de servicios del gobierno federal.

Las organizaciones de rescate de animales y los ayuntamientos también podrán registrar los animales bajo su responsabilidad y emitir la tarjeta de identificación, que incluirá un código de identificación (Código QR). Este código podrá colocarse en el collar del animal, lo que permitirá a cualquier persona localizar al guardián a través de la cámara de un teléfono móvil.

La Ley 15.046/2024, aprobada en noviembre por el Congreso y sancionada el pasado día 18 por el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva, autoriza la creación del registro por el Gobierno Federal. El sistema reunirá información sobre los propietarios y sus mascotas para facilitar el control de las zoonosis y la lucha contra el abandono y el maltrato de animales. La medida también debería proporcionar más seguridad en las transacciones de compraventa.

Según la nueva ley, el registro deberá contener los datos de identidad y dirección del propietario, así como el origen y las características de los animales: raza, sexo, edad real o presunta, vacunas administradas y enfermedades contraídas o en tratamiento, y lugar donde se encuentra el animal. Será obligación de los tutores comunicar la venta, donación o muerte del animal, indicando la causa.

Si la mascota lleva un microchip subcutáneo que la identifique, el dispositivo podrá incluirse en el registro. “Salvo en los casos en que el procedimiento esté financiado por el gobierno federal, el microchip no es obligatorio. Sin embargo, se recomienda como forma de aumentar la seguridad y el control de los animales”, explica el Ministerio.

El microchip es un dispositivo que se pone bajo la piel del animal por los veterinarios, con un código asociado a los datos del propietario. Para acceder a la información, sin embargo, es necesario utilizar un lector adecuado, normalmente disponible en las clínicas veterinarias que realizan el procedimiento.

Políticas públicas

El registro será realizado principalmente por los guardianes responsables. Sin embargo, las organizaciones no gubernamentales (ONG), los ayuntamientos y el Distrito Federal podrán registrar los animales bajo su cuidado, incluidos los que se encuentran en refugios, perreras, centros de zoonosis o en la calle. Cuando estos animales sean adoptados, el sistema transferirá la tutela.

Además, según el Ministerio, los municipios y estados que se adhieran al sistema tendrán acceso a un área específica donde podrán consultar y analizar los datos estadísticos locales. “Esta información es esencial para la gestión de los programas locales de protección y gestión ética de la población de perros y gatos, incluyendo acciones como campañas de vacunación, castración y microchip, campañas de adopción, entre otras.”

El registro será accesible al público a través de la Internet y los datos serán controlados y centralizados por los estados y el gobierno federal. En el país ya existen iniciativas similares, pero descentralizadas.

Los animales utilizados en la producción agrícola, para productos o servicios, no necesitarán registrarse. La ley sólo se refiere a los animales de compañía.

Impuesto

Tras la aprobación del proyecto en el Senado, surgieron especulaciones sobre la posible creación de un impuesto para los dueños de animales domésticos, como ocurre en otros países, como Alemania. Sin embargo, la nueva ley no contempla el cobro de ningún tipo de impuesto, solo autoriza la creación del registro, que será gratuito.

“En Brasil, el objetivo es mejorar la gestión y la planificación de acciones, sin imponer sanciones ni cargos. El acceso público a los datos será limitado a lo necesario para respaldar políticas públicas, garantizando la privacidad y protección de los datos personales”, destacó el gobierno federal en un comunicado.