En la Cumbre del Futuro, Lula habla de la “falta de audacia” de la ONU
En su primer discurso en este viaje a Nueva York para la Asamblea de las Naciones Unidas (ONU), el presidente Luiz Inácio Lula da Silva dijo que el Pacto para el Futuro, documento que firmarán los líderes mundiales en la ciudad estadounidense, apunta en una dirección, pero que a la entidad le falta "ambición y osadía" para cumplir su papel. El mandatario brasileño habló durante la Cumbre del Futuro, que tuvo lugar el domingo (22) y citó los recientes conflictos armados en el mundo actual. Según él, la crisis de gobernanza global exige cambios estructurales.
“La pandemia, los conflictos en Europa y Oriente Medio, la carrera armamentística y el cambio climático ponen de manifiesto las limitaciones de las organizaciones multilaterales. La mayoría de los organismos carecen de la autoridad y los medios de aplicación necesarios para hacer cumplir sus decisiones. La Asamblea General ha perdido su vitalidad y el Consejo Económico y Social se ha vaciado”, dijo Lula al intervenir en la Cumbre del Futuro.
Pacto para el Futuro
El evento, previo a la Asamblea General de la ONU, reúne a líderes mundiales para debatir formas de afrontar las crisis de seguridad emergentes, acelerar el cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y abordar las amenazas y oportunidades de las tecnologías digitales.
Lula destacó como aspectos positivos del Pacto el tratamiento “sin precedentes” de cuestiones importantes como la deuda de los países en desarrollo y la fiscalidad internacional; la creación de un foro de diálogo entre jefes de Estado y de Gobierno y dirigentes de instituciones financieras internacionales. Según Lula, esto promete volver a situar a la ONU en el centro del debate económico mundial.
El presidente también citó los avances hacia una gobernanza digital inclusiva que “reduzca las asimetrías de una economía impulsada por los datos y mitigue el impacto de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial”. “Todos estos avances serán loables y significativos, pero aún nos falta ambición y audacia”, dijo.
Asimismo, criticó al Consejo de Seguridad de la ONU, afirmando que la legitimidad del organismo se reduce «cada vez que aplica un doble rasero o se omite ante las atrocidades”. Para Lula, las instituciones de Breton Woods, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, no consideran las prioridades y necesidades del mundo en desarrollo.
“El Sur Global no está representado de forma coherente con su actual peso político, económico y demográfico”, afirmó.
El presidente afirmó que en los últimos 20 años se ha avanzado poco en la agenda multilateral para reformar el sistema de la ONU y citó como medidas positivas la Comisión de Consolidación de la Paz, creada en 2005, y el Consejo de Derechos Humanos, creado en 2006. Sin embargo, advirtió de que los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pese a haber sido el mayor “empeño diplomático de los últimos años”, están en vías de ser “nuestro mayor fracaso colectivo”.
“Al ritmo actual de implementación, sólo el 17% de los objetivos de la agenda 2030 se alcanzarán a tiempo. Como presidente del G20, Brasil lanzará una alianza global contra el hambre y la pobreza para acelerar la superación de estos flagelos”, afirmó.
Lula también dijo que, al mismo ritmo, los niveles de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y de financiación para el clima serán insuficientes para mantener el planeta a salvo. “En colaboración con el Secretario General [de la ONU, António Guterres], como preparación para la COP30, vamos a trabajar por un equilibrio ético global, reuniendo a diversos sectores de la sociedad civil para pensar la acción climática desde la perspectiva de la justicia, la equidad y la solidaridad”, prosiguió.
Derechos humanos
En materia de derechos humanos, el presidente brasileño señaló que el mundo tiene la responsabilidad de no retroceder en la agenda de los derechos humanos y la promoción de la paz.
“No podemos retroceder en la promoción de la igualdad de género, ni en la lucha contra el racismo y todas las formas de discriminación. Tampoco podemos volver a vivir con amenazas nucleares. Es inaceptable retroceder a un mundo dividido en fronteras ideológicas o zonas de influencia. Naturalizar el hambre de 733 millones de personas sería vergonzoso. Dar marcha atrás en nuestros compromisos es poner en peligro todo lo que hemos construido con tanto esfuerzo”, afirmó.
Cumbre del Futuro y Asamblea General
La Cumbre del Futuro aprobó el domingo un documento negociado entre los Estados miembros para reforzar la cooperación mundial y establecer compromisos para una mejor adaptación a los desafíos actuales, con vistas a un multilateralismo renovado y eficaz, y en beneficio de las generaciones futuras.
El próximo martes (24), Lula pronunciará el discurso de apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Por tradición, desde la 10ª sesión de la cumbre, el presidente de Brasil ha sido siempre el primer país en tomar la palabra.