Improvisado y sin apoyo fue el inicio del deporte paralímpico en Brasil
La primera medalla paralímpica de Brasil fue conquistada por casualidad, en 1976. En aquel entonces, los atletas Robson Sampaio y Luiz Carlos da Costa fueron a Toronto, Canadá, para unirse al equipo de baloncesto en silla de ruedas, pero terminaron por interesarse por un deporte llamado Lawn Bowls (también conocido como bolo césped), que no se practica en Brasil. Después de aprender rápidamente las reglas del deporte, se colgaron la medalla de plata.
La improvisación era muy frecuente en los juegos paralímpicos cuando empezaron a practicarse en Brasil. Así lo afirmó Michelle Barreto, doctora en educación física adaptada por la Universidad Departamental de Campinas (Unicamp), quien elaboró su tesis doctoral sobre el deporte paralímpico brasileño entre los años 1976 y 1992.
“En tiempos pasados, como no había muchos atletas, ellos practicaban varias modalidades. Así que no se ganaban medallas, porque no eran tan buenos en una sola cosa. Pero la prioridad entonces era la participación deportiva. En el caso de la primera medalla fue exactamente lo que sucedió”, dijo la investigadora.
La falta de reconocimiento de los atletas y del deporte paralímpico es también una marca de la época. Según la investigadora, los atletas se quejaban de que, aunque tuvieran buenas actuaciones, no se sentían reconocidos en la misma forma que los atletas de hoy. “Hablan con gran orgullo: '¡Por Dios! Me gané una medalla paralímpica, representé a mi país, pero la semana siguiente me dejaron en el olvido'. En la época no había ese mismo revuelo mediático que hoy día”, comenta Michelle Barreto.
“Yo viajaba, regresaba cargada de medallas y cuando llegaba al aeropuerto, nadie me conocía”, se quejó la exvelocista Ádria Santos, quien participó en seis paralimpíadas entre 1988 y 2008 y ganó 13 medallas. Santos también señaló la poca divulgación del deporte [paralímpico] por parte de la prensa. “Solo después de que nos llevamos un montón de medallas es que comenzamos a aparecer en los canales de televisión en abierto”, dijo.
Según ella, la visibilidad de los juegos paralímpicos aumentó a partir de la paralimpiada de Sídney, en 2000, que contó con una mayor cobertura de los medios.
João Batista Carvalho e Silva, primer presidente del Comité Paralímpico brasileño, también habló de la falta de información y de interés acerca del deporte paralímpico. Sin embargo, recordó que en 2004, cuando el nadador Clodoaldo Silva se colgó seis medallas de oro, los atletas paralímpicos lograron una mayor visibilidad.
El propio Clodoaldo aseveró que la Paralimpíada de Atenas fue un “hito en el reconocimiento del deporte adaptado. “Por primera vez, los juegos paralímpicos empezaron a ganar repercusión en el mundo y en Brasil. La sociedad brasileña empezó a darse cuenta de que no hay diferencia entre el deporte paralímpico y el olímpico”, dijo el atleta multimedallista en una entrevista con Agência Brasil, en la que también destacó los logros en materia de accesibilidad e infraestructura para la práctica del deporte paralímpico.
“En 1998, cuando empecé a nadar, no teníamos autobuses adaptados. No contábamos con ninguna ley de fomento al deporte paralímpico. Hoy ya lo tenemos todo, lo que ha supuesto grandes mejoras para las personas con discapacidad y también para el deporte paralímpico, que gracias a sus victorias y conquistas se ganó el respecto de la gente”, concluyó Clodoaldo.
Los Juegos Paralímpicos de Río 2016 se celebrarán del 7 al 18 de septiembre.
* Con la colaboración de Daniel Mello
Traducción: Lucas Magdiel
Fonte: Improvisado y sin apoyo fue el inicio del deporte paralímpico en Brasil