A pesar del incremento, el Banco Central redujo el ritmo de endurecimiento monetario. Luego de dos aumentos consecutivos de un punto porcentual seguidos, la tasa se elevó en 0,5 puntos porcentuales.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor Amplio (IPCA), considerado la inflación oficial del país, registró una caída del 0,04% en septiembre de este año, es decir, una deflación.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor Amplio (IPCA), que mide la inflación oficial brasileña, registró un alza del 1,32%, la tasa mensual más alta desde febrero de 2003, cuando había alcanzado el 1,57%.