Investigación revela que persiste la desigualdad en Brasil

Seis multimillonarios de Brasil poseen una riqueza equivalente al patrimonio de los 100 millones de brasileños más pobres. De mantenerse la tendencia de los últimos 20 años, las mujeres solo tendrán equiparación salarial con los hombres en 2047, mientras que la población negra no ganará lo mismo que los blancos hasta 2086. Según las previsiones del Banco Mundial, el país podría terminar el año con hasta 3,6 millones más de pobres.

Es lo que revela el informe “La distancia que nos une: un retrato de las desigualdades brasileñas”, divulgado por Oxfam Brasil. Por primera vez, la organización publicó un estudio en que indaga, con base en una serie de dados, las causas de la desigualdad y los posibles caminos para reducirla en un país donde los ingresos, la riqueza y los servicios básicos están muy mal distribuidos.

Katia Maia, directora ejecutiva de Oxfam, dijo que el objetivo de la entidad es divulgar un informe anual sobre la desigualdad y abordar problemas como por ejemplo la injusta política tributaria brasileña. “Pagamos muchos impuestos, pero ello no significa que la carga tributaria sea excesiva. En realidad, es injusta, y quienes pagan la cuenta son clase media y los sectores más pobres”, dijo.

Tributos indirectos

El documento identifica fallos en la forma como se recaudan impuestos en Brasil en comparación con otros países. Además de la alta carga de tributos indirectos, el informe cuestiona la exención de impuestos sobre los beneficios y dividendos de las empresas y la baja carga de tributos sobre el patrimonio, que contribuyen para aumentar la concentración de la riqueza en manos de los más ricos.

Maia cree que las autoridades brasileñas pueden hacer esfuerzos para lograr una tributación más justa, incluso antes de impulsar una necesaria reforma tributaria. Uno de los problemas a resolver, señaló, es la evasión de impuestos. Solo en 2016, según datos oficiales, más de US$ 85 millones dejaron de ser recaudados.

El informe de Oxfam se refiere al mercado laboral como un importante factor de reducción de la desigualdad de ingresos en Brasil en los últimos años. La estabilización de la economía y la inflación en los últimos 20 años permitieron al país invertir en la generación de empleo, en la valorización real del salario mínimo y en la formalización del mercado laboral. Resalta, sin embargo, que existen diferencias que aún necesitan ser abordadas, como la brecha salarial entre hombres y mujeres y entre negros y blancos con el mismo nivel educativo.

Traducción: Lucas Magdiel