Mineros atacan base federal en poblado indígena
Una base federal ubicada en la aldea Palimiú, en la Tierra Indígena Yanomami, en Roraima, sufrió ataques de mineros en la madrugada del miércoles (22). Así lo informó el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables (Ibama), en un comunicado divulgado en la noche del jueves (23). El ataque justificó la solicitud presentada a la Policía Federal (PF) para reforzar la seguridad en el sitio.
El espacio atacado sirve para prohibir la entrada de buques clandestinos en el territorio y completó solo dos semanas de funcionamiento. Según informó el Ibama, mineros armados rompieron el bloqueo establecido en el río Uraricoera y dispararon contra los agentes del Ibama que abordaron una de las embarcaciones. Los inspectores respondieron con disparos. En el tiroteo, uno de los mineros, cuyo nombre no se hizo público, resultó herido y fue detenido por la Policía Federal. Estuvo hospitalizado hasta el jueves por la noche.
Los delincuentes bajaban por el río en siete embarcaciones llamadas "voadeiras", de 12 metros de eslora cada una, cargadas de casiterita, un metal cuya demanda ha aumentado. El cargamento fue identificado por drones operados por inspectores del Ibama. Tras el ataque, los delincuentes huyeron.
La seguridad de la base de control está a cargo de agentes de la Fuerza Nacional de Seguridad Pública, de la Policía Federal de Carreteras y del Ibama. El pasado lunes (20), la base recibió una estructura de cables de acero y desde entonces, según el Ibama, ningún barco cargado se ha dirigido hacia las minas.
Para el presidente del Ibama, Rodrigo Agostinho, se trata de un ataque criminal programado. "Todos los que intenten romper el bloqueo serán detenidos. Acabar con la minería ilegal es una determinación del presidente Lula", añadió.
En mayo de 2021 comenzaron una serie de incursiones de mineros en la región de Palimiú, que dispararon armas de fuego y lanzaron bombas de gas. El grupo de invasores llegó a disparar contra un equipo de la Policía Federal que fue a ayudar a los yanomamis. La zona tiene una población de unos 1.000 habitantes.