Sigue aumentando el registro de nuevos agrotóxicos en Brasil
Brasil es el más grande consumidor de agrotóxicos del mundo y ya ha aprobado 505 nuevos registros de plaguicidas solo este año, según datos del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAPA).
Entre 2019 y 2022, se autorizaron 2.181 nuevos registros, un promedio de 545 por año, y la expectativa es que este número crezca aún más si el presidente Luiz Inácio Lula da Silva sanciona el proyecto de ley sobre agrotóxicos recientemente aprobado en el Senado.
Entre otros cambios, el proyecto de ley prevé la creación de un riesgo aceptable para las sustancias cuyo registro está actualmente prohibido por tener efectos relacionados con el desarrollo de cáncer, alteraciones hormonales, problemas reproductivos o daños genéticos.
La publicación Atlas dos Agrotóxicos (en español, Atlas de los Plaguicidas), elaborada por la Fundación Heinrich Böll, revela que, desde 2016, Brasil ha batido récords consecutivos en la serie histórica de registros de plaguicidas, iniciada en 2000. En 2022, se registraron 652 plaguicidas, 43 de los cuales eran nuevos ingredientes activos.
Aunque está de acuerdo en que el actual proceso de registro es lento, Alan Tygel, de la Campaña Contra los Plaguicidas, cree que lo ideal sería, en realidad, que los órganos de control sanitario y ambiental participaran más en el análisis de las solicitudes de registro, en lugar de flexibilizar la ley. "El primer año de Lula causó mucho descontento. Esperábamos señales de mayor preocupación", dijo Tygel, uno de los autores del atlas.
Residuos
La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) informó el pasado miércoles (6) que uno de cada cuatro alimentos de origen vegetal en el país contiene residuos de pesticidas prohibidos o en niveles superiores a los permitidos por la ley. La encuesta forma parte de un estudio del Programa de Evaluación de Residuos de Plaguicidas de la agencia, que analizó 1.772 muestras de 13 alimentos diferentes recogidas en 79 municipios brasileños en 2022.
De los 2,6 millones de toneladas de plaguicidas utilizados en el mundo cada año, Brasil emerge como uno de los mayores consumidores de este mercado, que generó casi 28 mil millones de euros, alrededor de R$ 101 mil millones, solo en 2020, según el Atlas de los Plaguicidas. El estudio muestra que, en 2021, el país se convirtió en el mayor importador mundial de estas sustancias, con un salto de 384.501 toneladas en 2010 a 720.870 toneladas en 2021, un aumento del 87%.
Salud pública
El crecimiento del uso de plaguicidas en Brasil coloca al país en una posición delicada en términos de seguridad alimentaria y salud pública. Con datos de la propia Anvisa, el Atlas constató que entre 2010 y 2019 se registraron 56.870 casos de intoxicación por plaguicidas, lo que representa un promedio de 5.687 casos al año, o aproximadamente 15 personas intoxicadas cada día. Sin embargo, el propio Ministerio de Salud brasileño admite que el número de casos subregistrados es elevado y que el número real de personas envenenadas puede ser mayor.
El Atlas también muestra que, en Brasil, el Sistema Único de Salud (SUS) puede gastar hasta R$ 150 por caso de intoxicación por plaguicidas, lo que supone un coste anual estimado de R$ 45 millones. El coste para el SUS puede llegar a US$ 1,28 por cada US$ 1 invertido en pesticidas, dependiendo del tratamiento.
