El sida en Brasil: suben los casos, pero cae la mortalidad
En 2023, Brasil registró un aumento del 4,5% en el número de casos de VIH en comparación con 2022. Sin embargo, en el mismo periodo, la tasa de mortalidad descendió a 3,9 muertes por cada 100 mil habitantes, el nivel más bajo en los últimos diez años, según datos divulgados el jueves (12) por el Ministerio de Salud.
En total, se notificaron 38 mil nuevos casos de la enfermedad el año pasado. La mayoría de ellos ocurrió en hombres (alrededor de 27 mil). En cuanto al rango de edad, los casos se concentran principalmente en personas de entre 25 y 29 años. Las muertes por sida llegaron a 10.338 en 2023, la cifra más baja registrada desde 2013.
De acuerdo con el Ministerio de Salud, el incremento de casos se relaciona con la mayor disponibilidad de la Profilaxis Preexposición (PrEP). Para comenzar la profilaxis, es necesario realizarse la prueba del VIH, lo que ha permitido identificar a más personas con infección y, de forma inmediata, incluirlas en terapia antirretroviral. “El desafío ahora es reincorporar a las personas que abandonaron el tratamiento, muchas de ellas durante el gobierno anterior, y garantizar que todas las personas recién diagnosticadas accedan al tratamiento para mejorar su calidad de vida", señaló el ministerio en un comunicado.
En 2023, el país alcanzó los 109 mil usuarios en tratamiento con PrEP, en comparación con los 50,7 mil de 2022. La profilaxis se distribuye gratuitamente a través del Sistema Único de Salud (SUS) y es una de las principales estrategias para prevenir la infección por VIH.
El aumento en el diagnóstico ha permitido que Brasil avance hacia el objetivo de eliminar el sida como problema de salud pública para 2030, compromiso asumido con las Naciones Unidas. En 2023, el 96% de las personas infectadas con VIH que desconocían su estado fueron diagnosticadas.
El objetivo de la ONU establece que el 95% de las personas que viven con VIH sean diagnosticadas, que el 95% de estas reciban tratamiento antirretroviral y que el 95% de quienes están en tratamiento alcancen la condición de VIH intransmisible. Según el Ministerio de Salud, los porcentajes actuales en Brasil son del 96%, 82% y 95%, respectivamente.