La red 5G en Brasil cumple un año con más de 10 millones de usuarios
En rápida expansión, la red 5G completa este jueves (6) un año de operación en Brasil con una disponibilidad que supera las metas establecidas por la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel). La tecnología cuenta con más de 10 millones de usuarios y atiende a más de 150 ciudades.
Según un estudio realizado por Conexis Brasil Digital, entidad que reúne empresas de telecomunicaciones y conectividad, la señal 5G ha alcanzado los 10 millones de usuarios 11 meses después de su lanzamiento, mientras que la red 4G alcanzó el mismo número en 26 meses.
En cuanto a las localidades atendidas, ya se ha instalado la señal 5G en todas las capitales, en todas las ciudades con más de 500 mil habitantes y en la mitad de las ciudades con más de 200 mil habitantes, según Conexis Brasil Digital.
Al subastar el servicio de 5G en Brasil, la agencia reguladora exigía la instalación de la tecnología en todas las capitales antes de septiembre del año pasado, con aproximadamente una antena por cada 100 mil habitantes. Los siguientes pasos son la oferta en todas las ciudades de más de 500 mil habitantes para julio de 2025 y en todas las localidades de más de 200 mil habitantes para julio de 2026.
Desafíos
De acuerdo con Conexis Brasil Digital, una de las razones de la rápida expansión de la red 5G fue el hecho de que la subasta privilegió las inversiones en la instalación y expansión de la tecnología, en lugar de centrarse sólo en quién pagaría la cifra más alta. A pesar de la rápida expansión, la entidad cita desafíos, como legislaciones municipales obsoletas que retrasan o impiden la instalación de más antenas.
Según estudios del proyecto Conecte 5G, creado por los proveedores asociados a Conexis, de las 155 ciudades brasileñas con más de 200 mil habitantes – incluidas las capitales –, la mitad de ellas (77) tiene leyes desfavorables o ninguna legislación específica para la instalación de antenas; 54 de estas ciudades tienen leyes de antenas favorables a la expansión del 5G; y 24 tienen legislación específica pero aún requieren ajustes para ganar más adherencia a la Ley General de Antenas.
La tecnología 5G tiene una ventaja sobre las redes anteriores al requerir el uso de antenas pequeñas, que no necesitan estar en torres y pueden instalarse en la fachada de los edificios e incluso en postes y semáforos, sin interferir con el paisaje urbano. Sin embargo, por tener una frecuencia más alta y una longitud de onda más corta, la red requiere la instalación de más antenas que otros tipos de señales.
Según el proyecto Conecte 5G, el avance de la señal 5G requerirá entre cinco y diez veces más antenas que la 4G. Los operadores piden reglas más claras y licencias más ágiles para mantener la velocidad de expansión de la tecnología.
